El conductor de un vehículo ha sido cazado circulando a 162 kilómetros por hora en un tramo de la Ronda de Dalt cuya velocidad máxima permitida es de 60 km/h.

La Guardia Urbana de Barcelona ha denunciado penalmente al sujeto por exceso de velocidad, pues casi triplicaba el límite.

Riesgos y mayor gravedad de las lesiones

Ante el suceso, el cuerpo policial ha recordado a través de sus redes sociales algunos de los peligros que puede comportar circular por encima del límite permitido, pues la velocidad excesiva dificulta el control del vehículo por parte del conductor.

Asimismo, reduce su campo visual y aumenta la distancia de frenada, así como la gravedad de las lesiones en caso de sufrir un accidente de tráfico.