La sección de Delitos de Odio y Discriminación de la Fiscalía Provincial de Barcelona pide dos años de cárcel para un tuitero que publicó mensajes de "odio" falsos contra los menores no acompañados, los llamados menas.
En una nota, el ministerio público informa de que ha pedido a la Audiencia Provincial de Barcelona la apertura de juicio oral contra JJMF, la persona que llevaba la cuenta de Twitter @CastigadorBruce, que emitió mensajes hostiles contra los menores y de apoyo a las idea de la extrema derecha. Por ello, Fiscalía pide dos años de prisión para el acusado, así como inhabilitación y una multa equivalente.
Un vídeo de China
La oficina de Miquel Àngel Aguilar alerta de que el internauta publicó un post en la red de los 280 caracteres en 2019 que contenía un vídeo en el que un hombre golpeaba salvajemente a una mujer. El usuario de Twitter aseguró que tras la agresión, el atacante , que describía como un "mena", "violaba" a la mujer después de los golpes.
El mensaje del navegante, que tenía cinco millones de seguidores, fue retuiteado en 19 ocasiones, generó 13 aprobaciones y 93 comentarios. Lo cierto es que la publicación presentaba un vídeo grabad en China en junio de 2019. Los hechos no habían ocurrido en Canet de Mar, como sostenía @CastigadorBruce.
"Difamar" a los menas
Fiscalía asegura que el objetivo del tuitero era "difamar de forma global e injusta" el colectivo de los tutelados y, en particular, "a los niños marroquíes". Quiso el internauta vincular a este colectivo con "los actos violentos y las agresiones sexuales".
El ministerio público resalta que el investigado pretendía "aumentar los prejuicios y estereotipos" contra los menores, un grupo "especialmente vulnerable". Su meta era crear "hostilidad" y "rechazo", apostilla el equipo de Aguilar.
"Xenófobo y racista"
Además de contra los menas, @CastigadorBruce emitió otros mensajes contra diversos colectivos sociales. Asimismo, divulgó frases de un miembro del Ku Klux Klan relativo a la supuesta necesidad de "protección de los niños blancos".
Los hechos descritos son constitutivos de un delito contra los derechos fundamentales y las libertades públicas, cree el fiscal. Por ello, pide a la Audiencia a la apertura del juicio oral, procedimiento en el que estima que se debería condenar al acusado a dos años de cárcel, una multa de 12 meses a razón de 18 euros al día, y inhabilitación para ejercer de profesor de cinco años.