Un grupo de ocho personas provocó un incidente desagradable tras negarse a mostrar el certificado Covid para entrar al restaurante Granja Caralt de Mataró. Además, tampoco querían ponerse las mascarilla. Debido a esta situación, seis agentes de la Policía Local tuvieron que desplazarse hasta el lugar para conseguir que abandonaran el establecimiento tras una hora de disputas.

Los implicados, cuatro adultos y cuatro menores, entraron al establecimiento y se sentaron. En el momento en el que un empleado se dirigió a ellos para pedirles su pasaporte de vacunación y que se pusieran la mascarilla, hicieron caso omiso. Los implicados se negaron a ello amparándose en que era ilegal pedir datos personales, siempre según su criterio.

Reincidentes

Durante la hora que duró el escarceo y aún con la presencia de los agentes municipales en Granja Caralt, los infractores se negaban a irse. Además, pidieron hojas de reclamaciones, amparados en el criterio de sus abogados, según el cual pedir el certificado Covid no era legal.

En total, los implicados cumplimentaron cuatro reclamaciones en una mesa de la terraza y luego se fueron. Al parecer, según explica Capgròs, estas mismas personas habrían participado en disputas similares en otros locales de la zona.