El inicio del pasaporte Covid en Cataluña arranca sin incidentes en bares, restaurantes y gimnasios, pero con quejas de los hosteleros, que se sienten "desbordados" ante la acumulación de clientes que, o no tienen el pasaporte Covid descargado todavía, o que lo tienen, pero no lo encuentran. Consideran que la gestión del Govern ha sido un "caos" y la implantación del certificado ha estado "mal organizada" desde el principio.
El certificado era obligatorio a partir del viernes pasado para entrar a esos establecimientos, además de las residencias, pero el gobierno de la Generalitat tuvo que dar marcha atrás ante el bloqueo de la aplicación y de la web para descargarlo.
Hosteleros descontentos
Según ha podido comprobar Crónica Global, los hosteleros están descontentos porque, a primera hora, cuentan con poca plantilla para hacer frente a todas las tareas. "Estoy solo; No puedo pedir el pasaporte Covid y atender a las mesas a la vez", dicen en un restaurante de Barcelona. Lo mismo sucede con las cafeterías: "Es un lugar de paso y es complicado pedir el certificado y preparar los cafés. La gente se acumula y vamos desbordados", lamentan desde una de los establecimientos Vivari.
Sin embargo, sí que notan que hay más personas que lo tienen descargado en comparación con la semana pasada. Quienes no tienen ni el documento ni una prueba negativa, no pueden entrar a los establecimientos, pero sí pueden consumir en la terraza o comprar el producto para llevar. Algunos, en cambio, se marchan cuando los empleados le piden el documento al no tenerlo.
Aumentan las bajas en los gimnasios
Los gimnasios también están afectados por esta medida. De momento, los centros consultados por este medio dicen que los clientes tienen el pasaporte Covid porque, durante toda la semana, han ido advirtiendo de que a partir de hoy sería obligatorio. Aun así, "hay gente que se enfada cuando se lo pedimos y no lo tiene", dicen desde un Eurofitness. También explican que han tenido que reforzar plantilla porque "no se llega a todo".
Todos los centros consultados coinciden en un aumento de solicitudes de baja. "La semana pasada recibimos entre 40 y 50 peticiones", lamenta una trabajadora. Para evitar eso, algunos centros deportivos optan por no cobrar cuota a quienes no tengan el pasaporte Covid, ya que creen que es algo "temporal".