El Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) ha aprobado la prórroga otros siete días de la limitación de reuniones privadas y públicas a diez personas y el aforo al 70% de las ceremonias civiles y religiosas en Cataluña, con un máximo de entre 1.000 y 3.000 personas, para frenar la pandemia del coronavirus.
Desaparece desde esta noche, además, el toque de queda en los 19 municipios catalanes donde aún está vigente tras los dos intentos del Govern por aplicar la restricción a la movilidad nocturna a las grandes ciudades y zonas metropolitanas, que fue tumbada en dos ocasiones por la sala de guardia del alto tribunal. Todo ello, en una jornada en que se consigue bajar de los 1.300 pacientes hospitalizados por Covid en Cataluña.
Consideraciones del TSJC
El alto tribunal ha recordado que ya avaló con anterioridad la limitación del derecho de reunión y la asistencia a actos civiles y religiosos, que la sala considera que son medidas "proporcionadas, idóneas y adecuadas para la contención, limitación y reducción del nivel de contagios actuales". Los magistrados han explicado que es importante que estas restricciones vayan principalmente dirigidas a las actividades de ocio de las franjas de edad que tienen una incidencia acumulada más elevada, "ya que es donde el riesgo de diseminación exponencial de la enfermedad es muy alto y hay la propagación de circulación del virus hacia otras franjas de edad más vulnerables".
El auto cita la resolución del Govern: "Todavía hay una situación de grave riesgo de progresión de la pandemia y con una presión sobre los sistemas sanitarios aún muy elevada y próxima a exceder la capacidad asistencial", ante lo que defendía seguir con la vacunación, limitar los contactos sociales y evitar grandes concentraciones de personas. Los brotes actualmente activos, según los últimos datos disponibles, se han presentado en el ámbito familiar (29,5%), seguido de las residencias geriátricas (20,8%) y por el ámbito social (19,5%).