El Gobierno zanja el bulo de los hidroaviones: el espacio aéreo estaba "al máximo"

El Gobierno ha zanjado el bulo de los hidroaviones en el incendio del Cap de Creus (Girona) que han alimentado sectores del independentismo catalán, sobre todo los vinculados a Junts, el partido del prófugo Carles Puigdemont. 

El Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico (Miteco) ha recordado que envió once medios aéreos al fuego que ha devastado parte del parque natural, recursos capaces de transportar más de 44.000 litros de agua. "Se ocupó al máximo el espacio aéreo, razón por lo que no se consideró ni oportuno ni necesario solicitar ayuda a la vecina Francia", ha subrayado el departamento de Teresa Ribera. 

Aviones desde toda España

El Ministerio ha precisado que envió dos aviones anfibio de gran capacidad desde Torrejón (Madrid) y Pollença (Baleares); dos aviones anfibios de capacidad media desde Reus (Tarragona); dos aviones de carga en tierra desde Empuriabrava (Girona) y un helicóptero Kamov desde Plasencia del Monte (Huesca). 

Como explicó este medio, Transición Ecológica reforzó el dispositivo ayer sábado, día en el que los Bomberos libraron la batalla más dura contra las llamas, que finalmente hoy se han dado por controladas. Sumó otro avión anfibio venido desde Matacán (Salamanca); un segundo helicóptero Kamov desde Guadalajara y otros dos aviones anfibio desplazados desde Requena (Valencia). La capacidad total de carga de agua era de 44.000 litros. 

Se ofreció a la UME

Hubo más. El Gobierno "se planteó reiteradamente" activar los servicios de la Unidad Militar de Emergencias (UME) para evitar daños a la población civil. A este respecto, cabe recordar que hubo vecinos desalojados y, también, un cámpin entero. Por ello, considera el Ministerio que hubo el "máximo respaldo" a los servicios de emergencias locales y autonómicos contra el incendio. 

Pese a este desempeño del Gobierno, sectores independentistas han hecho circular el bulo de que se vetó la llegada de dos hidroaviones desde Perpiñán (Francia), que no tiene base de Seguridad Civil francesa, sino solo una pista de reabastecimiento. Han abonado esta tesis de la conspiración Laura Borràs, presidenta del Parlamento catalán, y Joan Delort, director general de Prevención, además de los internautas y medios digitales más cercanos a Junts.