El Ayuntamiento de Barcelona está estudiando anticipar a este mes de abril la puesta en marcha del servicio de control de playas, que tenia previsto activar en junio. La intención es evitar aglomeraciones como las que se han registrado esta Semana Santa y prohibidas por la pandemia.
El teniente de alcalde de Prevención y Seguridad, Albert Batlle, ha explicado en una entrevista en Betevé que la Guardia Urbana actuará si se prevén más concentraciones como las que han obligado a desalojar a decenas de personas de las playas en los últimos días, al tiempo que ha celebrado la buena coordinación con los Mossos para actuar en estos casos. "Aumentaremos nuestros efectivos", ha asegurado.
Acciones en otros puntos
El litoral barcelonés es uno de los ‘puntos sensibles’ en cuanto a la concentración de personas y el consistorio estudia desplegar los informadores de playas antes de lo previsto si el buen tiempo anima a los ciudadanos a hacer reuniones multitudinarias. "No renunciamos a hacerlo si hay una masificación excesiva", dijo el teniente de alcalde de Prevención y Seguridad al programa 'Básics'.
Batlle ha explicado que a veces este tipo de concentraciones se convocan a través de las redes sociales, como ha ocurrido, ha añadido, en otras fases de la pandemia por coronavirus. Además, la playa no es el único punto crítico donde debe actuar a menudo la Guardia Urbana. También lo son puntos como el Born, la plaza de los Ángeles, los búnkeres del Carmel o el Parque de Collserola. Sobre este último lugar, el titular municipal de Seguridad ha explicado que en algunos casos ha sido necesario cortar el acceso a la carretera de las Aguas por la "masificación" de vehículos y ciclistas.