Dos vigilantes de seguridad y un perro arrestaron a un presunto carterista ayer en Barcelona. Los profesionales y el can detuvieron al pasajero, que se resistió a su puesta en custodia pese a que el animal le había mordido y el personal de seguridad lo había inmovilizado.
Los hechos ocurrieron el domingo sobre las once de la noche en la Estación del Nord. Los vigilantes detectaron al caco y trataron de detenerlo. Este se resistió, por lo que la pareja de profesionales utilizaron al perro guardián. Pasajeros que estaban en el hub de transporte inmortalizaron la escena con sus móviles. Algunos de ellos se quejaron de que el perro mordiera al presunto ladrón.
ADN Sindical: "Suben los robos"
Desde ADN Sindical, mayoritario en la seguridad privada, han alertado de que "la escasez de turistas en Barcelona está provocando que los carteristas se ceben con la gente local".
La plataforma avanza que "los robos en el transporte público se han disparado el fin de semana", tanto en la red de TMB como en los autobuses, como es el caso del vídeo que ha aflorado en las redes. En relación al uso del perro, ADN recuerda que "la persona se resistió a su arresto", por lo que el uso del animal "es proporcional y está justificado" para evitar daños en todas las partes.
La inseguridad preocupa en Barcelona
Los hechos ocurridos ayer tuvieron lugar horas antes de que el Ayuntamiento de Barcelona confirmara que, de nuevo, la inseguridad es el problema que más preocupa en la Ciudad Condal. Lo citan el 17,7% de los encuestados en el sondeo de servicios municipales, una cantidad superior a los que referencian el coronavirus (7,5%) y el paro (7,1%).
El concejal de Presidencia de Barcelona, Jordi Martí, se ha mostrado "sorprendido", por cuanto los tipos penales han caído un 41%, según los datos policiales oficiales. El retroceso del número de delitos, no obstante, es atribuible en parte a las restricciones económicas y de contacto social por la pandemia.