El Ayuntamiento de Barcelona instalará los primeros contenedores inteligentes de la ciudad en el barrio de Sant Antoni, para comprobar su funcionamiento y posteriormente extenderlos al resto de distritos.
El consistorio ha explicado en rueda de prensa que el primero será un contenedor de fracción orgánica que funcionará con algún tipo de identificación del usuario, como una tarjeta, el móvil o un llavero.
Aumentar la recogida selectiva
El nuevo contrato de limpieza, que entrará en vigor a principios de 2022, prevé que todos los nuevos contenedores que se adquieran incorporen las características tecnológicas necesarias para funcionar como inteligentes en un futuro. El nuevo contrato también prevé que los nuevos depósitos sean más bajos y reduce un 17% aquellos dedicados al rechazo. En contraposición, apuesta por aumentar en un 25% los de recogida selectiva.
En la misma línea encaminada a reducir el impacto en el medio ambiente, un 66% de la flota de los vehículos de limpieza serán eléctricos, en comparación al 20% actual. Este uno de los puntos de mejora que recoge el nuevo contrato, adjudicado a FCC, Sorigué, Valoriza y Urbaser, y que este viernes deberá ratificar el pleno municipal.