Los trabajadores de los servicios funerarios reclaman al Departamento de Salud de la Generalitat y al Ministerio de Sanidad ser considerados servicio esencial y poder ser vacunados lo antes posible. Esta solicitud, que la Asociación de Empresas de Servicios Funerarios de Cataluña (Asfuncat) notificó a las diferentes administraciones sanitarias hace una semana, no ha tenido respuesta por el momento.
Las funerarias de Cataluña, con 1.500 empleados, tienen alrededor de un 10% de su plantilla de baja por ser positivos por Covid-19 o ser contactos estrechos de personas contagiadas. La reclamación de preferencia en la vacunación, enviada por carta al secretario de Salud Pública Josep Maria Argimon, no ha recibido respuesta por el momento y los profesionales del sector han mostrado su malestar y el “riesgo” para ejercer la profesión ante la tercera ola de la pandemia.
Colectivo esencial de vacunación
La vacunación se iniciará, en la siguiente ronda, a colectivos pertenecientes al profesorado de los centros educativos, empleados de farmacia, policías y militares. No obstante, los profesionales de las funerarias argumentan que el contacto con los fallecidos por coronavirus y las aglomeraciones, aunque restringidas por aforo, de los funerales son un foco de contagio y de riesgo.
“La capacidad del sector es alta, pero tememos que las plantillas puedan reducirse debido a los contagios y ahora ya tenemos un 10 % de baja”, apunta Josep Maria Mons, presidente de Asfuncat. Las autoridades no han incluido al sector en el protocolo de vacunación y la reclamación de los profesionales de funerarias viene dada por el riesgo de contacto directo con los cadáveres de positivos por Covid, argumentando que su función es esencial en plena pandemia.