La muerte de un camionero en un accidente el pasado julio ha derivado en una investigación por homicidio imprudente. El conductor circulaba por la A-2, a la altura de Castellbisbal, cuando perdió el control del vehículo y chocó contra una mediana de hormigón. La cabina tractora se empotró contra un panel informativo y el impacto de una de sus vigas de hierro causó el fallecimiento del operario.
Ahora, la pericial de la sección de Tráfico de Mossos d'Esquadra concluye que el accidente se produjo a consecuencia del deficiente estado de los neumáticos del vehículo. Por este motivo ha denunciado penalmente a cinco empresarios de Salou, de nacionalidad española y colombiana, de entre 26 y 75 años, como presuntos autores de un delito contra los derechos de los trabajadores, y otro de homicidio por imprudencia grave. El caso lo instruye el Juzgado de Primera Instancia 6 de Rubí.
Vehículos en mal estado
Con el análisis del histórico de reparaciones del camión siniestrado, los Mossos descubrieron que sumaba más de un millón de kilómetros. Entre las anomalías detectadas: la ITV del semirremolque había caducado dos años atrás, y tampoco había pasado el mantenimiento adecuado, lo que podría ser, apuntan, la causa directa del accidente.
Además, los investigadores comprobaron que dichas irregularidades eran "práctica habitual" del parque móvil de dicha empresa. Automóviles de transporte y gran tonelaje que no pasaban las revisiones técnicas obligatorias, por lo que ya habían sido denunciados.
Último día en la empresa
Los responsables de la empresa habían despedido anteriormente a algún chófer por negarse a conducir camiones con repuestos de neumáticos antiguos. De hecho, el conductor fallecido el pasado julio, apuntan los Mossos, había decidido que, justamente, el día del accidente era el último que trabajaría para dicha empresa, ante la "desazón" que le suponía exponerse a esas circunstancias.