Que ningún niño ni niña se quede sin juguete esta Navidad. Este es el objetivo de la campaña de recogida que ha activado el Port de Barcelona este lunes 30 de noviembre. Se trata de una iniciativa impulsada por la sección de baile deportivo de la entidad, que distribuirá los artículos entre diferentes asociaciones benéficas que ayudan a colectivos vulnerables.
En un contexto en que la crisis económica provocada por la pandemia ha dejado en la cuneta a muchas familias con niños en edad de tener ilusión, en esta edición el esfuerzo es especialmente necesario. La recogida empieza hoy y se prolongará hasta el próximo 18 de diciembre.
Juguetes sin usar
Con el objetivo de minimizar el riesgo de contagio por contacto, tan solo se aceptarán juguetes nuevos y, de forma preferente, que no sean bélicos ni sexistas. A pesar de las circunstancias, se espera obtener buenos resultados, incluso mejores que los del año pasado, en el que se consiguió un total de 4.461 juguetes.
Las personas que quieren donar juguetes pueden entregarlos en las jaulas ubicadas en la entrada del SAU (World Trade Center de Barcelona, planta baja, edificio ESTE), en la entrada de los servicios médicos del WTC y en el vestíbulo del edificio ASTA (Ronda del Port, Tramo VI).
Una Navidad en crisis
De acuerdo con datos anteriores a la pandemia del Alto Comisionado contra la Pobreza Infantil, en España más de 640.000 niños viven en familias sin recursos para afrontar las fiestas navideñas. En estos momentos, aún no hay un estudio para determinar cuál es la cifra de menores que se encuentran en esta situación a raíz del Covid.
Sin embargo, se cuenta con la referencia de la última gran debacle económica que vivió el país. En 2014, justo cuando ya se había iniciado ligeramente el crecimiento económico, en España había 817.000 menores de 16 años en familias sin recursos. Y de estos, unos 250.000 no tenían juguetes en casa.
Lo importante es el detalle
En esta Navidad, especialmente triste para muchos, gracias a las donaciones muchas familias podrán hacer felices a los más pequeños. En definitiva, ese es el sueño de cualquier padre: ver sonreír a sus hijos.
Psicólogos consultados por Crónica Global destacan que la importancia está más en el detalle, que en el regalo en sí. Lo esencial es que el niño vea amor en el acto de entrega. Para los niños en riesgo de exclusión social lo más relevante no es el objeto que les den, sino que alguien se preocupe por ellos, les quiera hacer un presente, y en definitiva, les haga sentirse queridos.