El avance del coronavirus en Cataluña deja a más ingresados, pero menos graves

Cataluña consolida la tendencia de frenar el avance de la segunda oleada del coronavirus en el territorio. En las últimas 24 horas cae de nuevo la velocidad de transmisión del Covid-19, aunque el efecto en diferido que tiene sobre el sistema sanitario implica que se hayan registrado más ingresos hospitalarios. Todo ello, en una jornada que ha dado cierta tregua a la actividad en las unidades de cuidados intensivos.

Los datos divulgados por el CatSalut muestran como han entrado 52 personas más en los hospitales autonómicos para recibir tratamiento médico contra el virus. Esto eleva hasta las 2.687 el total de personas que están en alguna de las plantas de los centros que se han habilitado para atender la pandemia. De todas ellas, 583 requieren de ventilación artificial en una uci, 14 menos que en las cifras notificadas la jornada anterior.

Otros 3.700 casos confirmados

En las últimas 24 horas se han confirmado otros 3.775 casos en el territorio, por lo que se eleva hasta las 309.740 personas las que han contraído el virus desde marzo. De todas ellas, 279.842 se han detectado mediante una prueba PCR (6.577 más que el día anterior). La Generalitat apuesta por este sistema en lugar del test de antígenos porque es más fiable a la hora de encontrar a los asintomáticos, los grandes transmisores de la enfermedad.

El riesgo de rebrote se ha situado este jueves en 595 frente a 611, el dato divulgado el miércoles. También baja la velocidad de transmisión, la denominada Rt, una centésima. Cae a 0,87 cuando en la jornada precedente estaba en 0,88. Estos descensos muestran que las medidas de contención van por el buen camino, aunque los epidemiólogos y sanitarios reclaman que se mantenga la prudencia para mantener la curva a la baja.

Más decesos

Y es que el coronavirus aún deja un panorama desolador. En las últimas 24 horas en Cataluña han fallecido 141 personas por un avance fatal del Covid-19 en sus organismos. Esto eleva hasta 14.886 las personas que han muerto desde marzo y que se tiene constancia de que habían sido infectadas.

Hasta que no se dé con una vacuna o un tratamiento eficaz para poder frenar el avance del virus en los infectados, se reclama la máxima prudencia entre la ciudadanía. Se recuerda que la única vía por ahora efectiva de frenar el número de infectados es limitar al máximo la actividad social.