El Hospital Vall d'Hebron ha cerrado temporalmente su centro de detección exprés del VIH, situado en la zona de Drassanes de Barcelona, por el colapso derivado del Covid. El mayor centro sanitario de Cataluña ha centralizado su programa de enfermedades infecciosas para "optimizar" recursos en pleno pico asistencial por la pandemia.
Un portavoz del complejo sanitario ha explicado que "se ha trasladado el servicio al hospital" con el fin de "optimizar" recursos, en relación a los sanitarios que prestaban servicio en esta novedosa unidad, que arrancó en septiembre de 2019. Con lo que respecta a los pacientes, aquellos que se trataban en Drassanes se derivarán ahora a la ciudad sanitaria. Los que acudían al equipo de infecciosas sin tener Vall d 'Hebron como hospital de referencia serán atendidos en sus centros de atención primaria, explican los sindicatos.
Tensiones de personal
El movimiento de cierre del espacio de detección exprés del VIH en Drassanes, al que acudían a hacerse pruebas unas 40 personas al día para descartar el agente infeccioso que lleva al sida, llega en pleno tensionamiento de los recursos humanos en los hospitales.
Los mayores centros sanitarios de Cataluña están empezando a notar disfunciones en sus turnos de trabajo por el aumento de la carga laboral derivada del incremento del número de personas contagiadas con coronavirus. Ante ello, algunos hospitales ya están aplicando los turnos 12/12, esto es, jornadas de 12 horas para repartir a los sanitarios en dos turnos y ser capaces de lidiar con la mayor presión asistencial.
¿Quién comandará los hospitales satélite?
Este hecho, la falta de personal, pone sombras sobre uno de los grandes proyectos del Gobierno catalán contra el rebrote de coronavirus en 2020: los cinco hospitales satélite en los que se tratará a contagiados con el patógeno.
Los centros sanitarios construidos de cero se elevarán junto al Parc Sanitari Pere Virgili, Hospital Universitari de Bellvitge, Hospital Moisès Broggi y Hospital Germans Trias i Pujol, los cuatro en Barcelona o conurbación, y junto al Hospital Arnau de Vilanova de Lleida. Si bien las obras ya han arrancado --estarán listas en enero--, queda por ver qué sanitarios se encargarán de velar por los 500 pacientes que podrán acoger los hospitales de campaña en su conjunto.