Mujeres obligadas a prostituirse en un centro de estética y masajes de Cambrils, en Tarragona. Agentes de la Policía Nacional han arrestado a seis personas acusadas de un delito de trata de seres humanos con fines de explotación sexual y han desmantelado el local que funcionaba como burdel.
La organización captaba a las víctimas, de origen sudamericano y afincadas en Cataluña, bajo la falsa promesa de regularizar su situación administrativa en España. Así, les ofrecían un empleo en un supuesto centro de belleza, que resultó ser la tapadera de un prostíbulo, donde debía estar disponible para los clientes las 24 horas del día.
"Explotación extrema"
Bajo amenazas y coacciones, sometían a las mujeres a "condiciones de explotación extrema". Debían estar disponibles "a cualquier hora del día" para mantener relaciones sexuales con los clientes, en pésimas condiciones de higiene. También las obligaban a consumir sustancias estupefacientes y alcohol, para "doblegar su voluntad", han indicado desde el cuerpo. Además, trataban de intimidarlas con prácticas de santería.
Fue durante un descuido de uno de sus explotadores cuando una de ellas logró huir y denunciar lo sucedido ante la policía. El resto de víctimas por el momento ha declinado participar en la investigación contra la organización, en su mayoría, por miedo. Y es que la dueña del prostíbulo, como venganza, publicó fotos íntimas de la denunciante a través de redes sociales para que sus familiares pudieran verla.
Cocaína y pastillas abortivas
Durante el registro, los agentes localizaron papelinas de cocaína, una báscula de precisión, pastillas abortivas, dos equipos informáticos y diversa documentación relacionada con la publicidad del local, así como la contabilidad y lista de precios de los servicios. En una de las estancias también encontraron un altar de santería que los sospechosos utilizarían para amedrentar a sus víctimas.
Los seis arrestados, de nacionalidad colombiana, dominicana y española, entre los que se encontraba la principal responsable del prostíbulo, también están acusados de un delito contra la salud pública, la intimidad, amenazas y pertenencia a grupo criminal.