El Ayuntamiento de Barcelona ha conseguido reducir a más de la mitad la población de palomas que habitan en la ciudad, pero únicamente en las zonas donde se ha administrado el tratamiento anticonceptivo de nicarzabina que el consistorio empezó a aplicar en 2017.
En los puntos de la ciudad en los que no se ha actuado, fuentes municipales afirman que el número de aves ha aumentado un 11%. Pero los portavoces municipales se han mostrado satisfechos con los resultados, pues el método evita tener que capturar a las palomas y demuestra "la eficacia del sistema como herramienta de gestión ética" para la regulación de la especie.
Tres años con el tratamiento anticonceptivo
Barcelona empezó a administrar el tratamiento anticonceptivo de nicarzabina en 2017 para el control ético de la población de palomas. En ese momento, había un total de 3.801 de estas aves con el fármaco administrado y llegó a reducirse la población un 52% en 2018, con un total de 1.814 palomas tratadas.
Según datos municipales --el último balance es de noviembre de 2019-- la tendencia se ha mantenido en el conjunto de la población de palomas y se ha reducido su volumen en un 50,9%, con un total de 1.865 aves tratadas con el fármaco.
Esperan reducir la población hasta el 71,5%
En los puntos donde no se distribuye el anticonceptivo, la población de palomas ha aumentado un 11%, tal y como ha informado el consistorio este viernes en un comunicado. Aun así, el ayuntamiento mantiene su previsión y confía en que el número de aves de esta especie se reduzca en un 71,5% en 2022, como tarde.
El gobierno municipal también pone en valor "la eficacia del sistema como herramienta de gestión ética para la ciudad" ya que, según apunta, ha permitido reducir a la mitad el número de palomas sin necesidad de capturar. Lo ideal es que haya entre 300 y 400 palomas por kilómetro cuadrado mientras ahora se estiman entre 1.300 y 1.700 de estas aves, "lo que supone una superpoblación para la ciudad".
Así funciona el método ético del ayuntamiento
El sistema implantado consiste en administrar maíz recubierto de nicarbazina mediante 51 dispensadores automáticos de pienso instalados en 47 zonas de la ciudad, que fueron seleccionadas en relación al número de quejas ciudadanas recibidas por la elevada densidad de palomas y por las incidencias registradas.
En 37 de estos dispensadores se incorpora la dosis necesaria de fármaco, que produce "una infertilidad reversible" si se deja de suministrar, de manera que el número de palomas se reduce progresivamente de forma natural; y en los 10 restantes se suministra la misma cantidad de maíz que en el resto pero sin principio activo.