El Pirineo catalán ha sufrido un movimiento sísmico de magnitud 2,3 en la escala de Ritcher. El Instituto Cartográfico y Geológico de Cataluña (ICGC) señala que el terremoto se detectó a las 23.05 horas del miércoles 29 de julio y que se localizó a una profundidad de un kilómetro.
Según datos de Protección Civil, su epicentro fue Bellver de Cerdanya, perteneciente a la provincia de Lleida. Pero también se pudo percibir en otras localidades como Das, en Girona, y Bagà, en la demarcación de Barcelona. El fenómeno no ha provocado daños personales ni materiales en ninguna de las zonas afectadas.
Zona muy turística
La zona del Pirineo de Lleida donde se ha producido el terremoto es un destacado foco turístico durante estas fechas del año. Bellver de Cerdanya, el epicentro del fenómeno, tiene núcleos cercanos como Puigcerdà, la capital de la comarca de La Cerdanya, y también varias estaciones de esquí en funcionamiento, que en esta época ejercen como espacio de actividades deportivas y de ocio.
No es la primera vez que el Pirineo leridano sufre un terremoto. A finales del mes de noviembre del año pasado, la comarca de la Alta Ribagorça registró un seísmo con una magnitud 3,3 en la escala de Ritcher, con epicentro en Huesca. También durante el 2019, concretamente en abril, el Pirineo catalán percibió un terremoto de magnitud 4,5 con epicentro en el Alt Urgell, que se notó en gran parte de Cataluña.