Las playas de Barcelona han registrado durante la mañana de este sábado una menor afluencia de bañistas si se compara un sábado de verano habitual. Esto se produce tras las recomendaciones anunciadas el viernes por la Generalitat para reducir la movilidad y evitar la expansión del coronavirus.
Los agentes de la Guardia Urbana no han tenido que intervenir, como sí ocurrió en otros fines de semana para regular el acceso a las playas. Según ha destacado el cuerpo, no ha habido aglomeraciones y se han podido respetar las distancias de seguridad.
Evitar las salidas
La menor afluencia se produce un día después de que la Generalitat pidiera evitar aquellas salidas de casa que no sean esenciales ante los rebrotes en la capital catalana y su área metropolitana.
También se ha notado menos presencia de personas en las calles en determinados barrios, mientras se ha apreciado un aumento del uso de mascarillas, que son obligatorias en toda Cataluña, tanto en el interior como en el exterior incluso cuando se pueda mantener la distancia. El contrapunto se ha observado en las carreteras, donde miles de coches han abandonado Barcelona pese a la petición de la Generalitat de no desplazarse este fin de semana.