Un participante del campamento de verano de Cassà de la Selva, en Girona, ha dado positivo por coronavirus y ha forzado que tanto él como sus compañeros y monitores del grupo se encuentren en aislamiento. Todos aquellos que han estado en contacto con el usuario infectado y él mismo --12 personas en total-- han sido enviados a sus casas para evitar la posible dispersión del Covid-19, aunque el lugar donde llevaban a cabo las actividades estivales continúa abierto al público.
El alcalde de Cassà, Robert Mundet, ha descartado el cierre de las instalaciones, ya que "se han cumplido las recomendaciones necesarias para su buen funcionamiento".
Grupos reducidos
El grupo que compartía actividades con la persona que ha dado positivo era más reducido de lo habitual, una medida aplicada de forma excepcional este verano para delimitar posibles infecciones. La falta de relación y cercanía física entre las diferentes agrupaciones organizadas en el campamento es la clave en la que se basa Mundet para defender la continuación de la actividad estival.
Desde el Ayuntamiento de Cassà, se pide "tranquilidad" para continuar con el programa previsto "con total normalidad". El grupo afectado por esta decisión se mantendrá en aislamiento durante dos semanas, como mínimo.
Aviso a Salud Pública
El consistorio del municipio gerundense ha dado a conocer públicamente este caso a través de un bando municipal. Señala que ha trasladado la información al Área Básica de Salud de la localidad y a la Agencia de Salud Pública de Cataluña, dependiente de la Generalitat y responsable de la gestión de la pandemia.
La organización del campamento donde se ha registrado el positivo por coronavirus dependía del Club Tennis Cassà, que también ha sido informado del caso. Los usuarios de este club no son solo los vecinos de Cassà de la Selva, sino también de localidades vecinas, por lo que se ha alertado a sus respectivos ayuntamientos y a los propios miembros de la organización.