El 45,14% de los deportistas solo se protege del sol durante los meses de verano, mientras que un 13,51% lo hace sólo cuando se "acuerda". El 37,84% de ellos sí se protege durante todo el año, según una encuesta de la revista especializada SportLife. 

La reclusión provocada por la pandemia del Covid-19 ha hecho que muchas personas se decidieran a hacer deporte, especialmente cuando se permitió salir unas horas al exterior. La mayoría se ha decantado por el running y el ciclismo y con la llegada del verano es especialmente importante protegerse de los efectos del sol.

Preferencias

Más de la mitad de los españoles, un 53,49% va a dividir estos meses entre las estancias en la playa y la montaña, un 30% optará sólo por la playa y un 11% hará lo mismo con la montaña. Vayan donde vayan, la encuesta revela que durante el verano los deportistas mantendrán una práctica deportiva media de cuatro días a la semana.

Entre las actividades más practicadas vuelven a imponerse las antes citadas. El 75,5% apuesta por salir a correr, seguido de los que prefieren ir en bici (54,3%) o hacer senderismo (53,23%). El problema es que la mayoría revela a SportLife que no piensa en la protección solar y, a la hora de protegerse del sol, los deportistas españoles valoras especialmente el grado de protección seguido ya de lejos por el cuidado de la piel y la transpirabilidad.

Recomendaciones

La Academia Española de Dermatología y Venereología recuerda que el factor mínimo de protección debe ser del 30 y que deberá renovarse cada 2-3 horas y aplicarse 30 minutos antes de salir de casa. En las zonas sensibles, como puede ser la cara o cicatrices de más de seis meses el factor de protección debe ser más alto.

Los expertos subrayan que no se debe tomar el sol en los tramos horarios de mayor incidencia (de 12 a 17 horas). Asimismo, se debe recurrir a fotoprotectores físicos como gafas solares, gorras o sombreros. Y, si se va a la playa, siempre debe irse con sombrilla. En el caso de los niños se debe tener especial cuidado y tener en cuenta que los menores de seis meses no deben, en ningún caso, estar expuesto al sol ni siquiera con protección.