La desescalada lleva consigo el aumento del uso del coche privado y también la reactivación de los talleres y las inspecciones técnicas de vehículos (ITV), que han sufrido cambios durante la cuarentena.
Uno de ellos es que, con el cierre de las actividades económicas, muchos automóviles no han pasado la revisión obligatoria. El Gobierno ha establecido una moratoria mínima de 45 días y ofrece un plazo de 30 días adicionales para pasar la ITV una vez finalice el estado de alarma, previsto para el 21 de junio.
Citas
Más difícil es la situación de los coches que debían pasar una segunda inspección y que quedaron interrumpidas por el decreto del Ejecutivo. En este sentido, el Ministerio de Industria, recuerda que los plazos se mantienen y que, durante este periodo, los usuarios no podrán hacer uso del vehículo si no es para llevarlo al taller.
El cierre también ha provocado que quienes ya tuvieran hora durante el tiempo de reclusión, ahora, deban volver a pedir turno. Lo que no afecta es si ya se ha realizado el pago por adelantado, ya que los expertos aseguran que no caduca y no se deberá volver a pagar.
Seguro
Ante la posible avalancha de solicitudes para pasar la ITV, los talleres reclaman a los usuarios que eviten el colapso de los establecimientos. Recuerdan que disponen de un mes desde el fin del estado de alarma, por lo que reclaman que se ajusten a los plazos.
Los expertos, señalan, que el seguro del vehículo por norma general no ofrece cobertura si no se ha pasado la inspección. Aun así, el Gobierno ha aprobado que, durante el periodo de vigencia del estado de alarma, el vehículo quede asegurado pese a tener la ITV caducada.