Cataluña se sitúa como la comunidad con más muertos por Covid-19

Las cifras actualizadas de fallecimientos por Covid-19, la enfermedad que provoca el virus SARS-CoV-2, son muy negativas para Cataluña. El guarismo es demoledor: 7.097 muertes por la infección que causa el virulento patógeno si se cuenta con las funerarias, que aportan datos mucho más cercanos a la mortalidad real [ver comunicado de la Generalitat de Cataluña aquí]. Con esta base, la autonomía catalana supera a Madrid y se coloca con ocho veces más pérdidas de vidas humanas que, por ejemplo, Andalucía, con una población de solo el 12% más.

A la espera de que el resto de autonomías aporten también sus recuentos de fallecidos en equipamientos funerarios, datos mucho más aproximados a la realidad que los hospitalarios, el conteo catalán es inquietante. Los 7.097 muertos por Covid-19 reconocidos por la Consejería catalana de Salud propulsan a Cataluña por encima de la cifra de exitus en la Comunidad de Madrid (6.724) hasta ayer. El guarismo catalán es ocho veces superior al que ha declarado Andalucía (865), según los últimos datos publicados por el Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social el miércoles, 15 de abril.

Torra durante la rueda de prensa internacional / 324

Las residencias, el 26% del total

Con el recuento real aportado por la Generalitat de Cataluña ayer, cambia también el porcentaje de fallecimientos que han soportado las 1.073 residencias catalanas, uno de los puntos negros del coronavirus en España. Según las cifras aportadas por el Departamento catalán de Salud, hasta 1.872 personas han perdido la vida en geriátricos o centros sociosanitarios desde el inicio de la pandemia. Ello supone un 26% de los 7.097 fallecimientos vinculados al SARS-CoV-2 hasta la fecha en la comunidad. No obstante, este dato es inexacto, pues ha sido esta semana cuando Salut ha empezado a realizar test masivos PCR en los asilos. Una parte desconocida del total de las 7.097 muertes desde el inicio del envite del microorganismo son, también, óbitos en residencias a quienes nadie les hizo la prueba postmortem, tal y como criticó el sector en su momento.

Asimismo, del global de fallecidos en Cataluña por las patologías que provoca el virus SARS-CoV-2, mayoritariamente infecciones respiratorias agudas, hasta 456 son exitus en domicilios. Estos ciudadanos tampoco fueron sometidos a pruebas de laboratorio. Lo que es más: se desconoce cuántas de estas 456 muertes eran personas mayores con comorbilidad a quienes los servicios de emergencias decidieron no trasladar al hospital, tal y como marcaba el protocolo interno del SEM publicado a finales de marzo.

Cataluña, alta mortalidad en el mundo

También preocupante, la cifra real de mortalidad revelada ayer por el Gobierno catalán sitúa a la región como un territorio del globo con mortalidad elevada. Según los datos diarios publicados por el Centro Europeo de Prevención y Control de Enfermedades (ECDC, por sus siglas en inglés) diariamente [ver última actualización aquí], los 7.097 fallecimientos en Cataluña superan ampliamente los 3.254 registrados en Alemania; son casi el 50% de los declarados por Francia (15.729) o rebasan los comunicados oficialmente por Irán, uno de los países más castigados por la pandemia (4.683). El ECDC recuerda que los datos son comunicados por las autoridades sanitarias de cada país, por lo que puede haber un sesgo desconocido si los estados no utilizan el mismo método de recuento que la Generalitat.

Fuentes del sector sanitario indicaron ayer a este medio que el nuevo método de recuento del Ejecutivo de Quim Torra tiene como objetivo no la transparencia, sino la voluntad de presionar al Gobierno y a otras administraciones autonómicas. De hecho, el propio president ha utilizado hoy jueves, 16 de abril, los nuevos datos como argumento para defender de nuevo un encierro más duro, algo que ha venido defendiendo Torra desde el inicio de la batalla nacional contra el patógeno. De momento, el vicepresidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio Aguado, ya ha declarado que la región podría superar los 10.000 fallecidos con un recuento similar al utilizado por la Consejería catalana de Salud.