El Departamento de Salud de la Generalitat ha confirmado 135 nuevos casos positivos de coronavirus en Cataluña en las últimas 24 horas, que dejan un total de 316 pacientes contagiados, de los que 25 se encuentran graves, según la última actualización de la institución.

En el balance se recogen que seis personas han muerto desde el inicio de la pandemia en Cataluña, tres de ellas por el brote concentrado en Igualada (Barcelona). Se trata de una mujer de 71 años, otra de 83 y un hombre de 86 años, todos ellos con patologías previas importantes. En la localidad se han detectado hasta el momento 49 casos, de los que 33 afectan a profesionales sanitarios. Además, hay 250 personas en observación. El alcalde de Igualada ha anunciado el cierre de todos los centros educativos y del transporte interurbano en la cuenca del Ódena.

Tercera comunidad más afectada

Salud ha confirmado también que hay 49 casos positivos de Covid-19 entre profesionales sanitarios, al tiempo que otros 400 se encuentran confinados. 

Cataluña es la tecera comunidad autónoma con mayor número de personas afectadas por Covid-19, por detrás de Madrid (1.388) y País Vasco (346), según datos del Ministerio de Sanidad.

Cierre de centros educativos

La progresión de la epidemia ha obligado a las autoridades catalanas a decretar hoy el cierre de todos los centros educativos y la paralización de todas las actividades en todas las universidades, mientras se están cancelando todos los actos públicos con afluencia masiva de personas.



El departamento de Salud ha insistido en la necesidad de tomar las medidas preventivas de higiene genéricas, desde lavarse las manos a menudo con agua y jabón o con soluciones alcohólicas, especialmente después del contacto directo con personas enfermas o su entorno, hasta evitar el contacto estrecho con personas que muestren signos de afección respiratoria, como tos o estornudos.



Salud recomienda mantener una distancia de dos metros aproximadamente con las personas con síntomas de infección respiratoria aguda y taparse la boca y la nariz con pañuelos desechables o con la cara interna del codo en el momento de toser o estornudar y lavarse las manos enseguida.