La coherencia, como núcleo catalizador en todos los proyectos gastronómicos, ha sido el eje principal que ha iluminado la búsqueda de los nuevos galardones de la veterana Guía Repsol. Una coherencia que se traslada al respeto por el producto del territorio, la tradición culinaria de la zona y en consecuencia deriva en una relación más sostenible y lógica con el entorno. Unos vínculos en los que muchos de nuestros cocineros llevan años trabajando y cuyo reconocimiento llega en forma de premio. Los prestigiosos Soles Repsol.
A lo largo del pasado 2019, 50 inspectores han recorrido toda la geografía española en busca de restaurantes que armonicen en sus propuestas conceptos tales como kilómetro cero, economía circular o identidad del territorio. Una tarea nada desdeñable si tenemos en cuenta que han visitado más de 1300 establecimientos.
Cataluña, con luz propia
El intenso trabajo ha dado como fruto un mapa gastronómico que alcanza a todos y cada uno de los rincones de nuestro país. En lo alto del soleado podio, Cataluña brilla con especial intensidad. Y es que de los 545 Soles que conforman la guía de 2020, la comunidad catalana es la que acumula el mayor número de galardones: 89. Además es la que cuenta con mayor número de Tres Soles (la máxima distinción) 9 en total, 25 con Dos Soles y 55 con Un Sol. Nos vamos de viaje tenedor en mano.
Les Cols de Olot es la última incorporación a este exclusivo club de triunviratos soleados. La chef Fina Puigdevall está al frente de este establecimiento de La Garrotxa, un territorio cuyos productos, como ella misma define “no viajados”, están omnipresentes en sus platos: El Aveiro de payés, el maíz, la patata de la Vall d’en Bas, las judías de Santa Pau, la trufa, el alforfón, los caracoles, el jabalí, berenjena blanca, castañas o setas, todos ellos elaborados en sus fogones sin artificios, son la puesta en escena de un proyecto muy arraigado al entorno.
Monserrat Montalvo del Celler de l'Arbocet / Guía Repsol
Tanto es así que ella misma nació en la masía que ahora ocupa el restaurante. Un hermoso edificio, cuyo interiorismo a cargo de RCR Arquitectos, se encuentra en perfecta armonía con la estacionalidad del paisaje. El lugar perfecto para saborear la gran despensa natural que es el corazón del territorio catalán.
Producto de mercado
Los siguientes tienen en común que los tres se encuentran en Barcelona. Angle nos acerca desde el barrio del Eixample (Aragón 214) la propuesta del televisivo chef Jordi Cruz. Él diseña los platos que ejecuta en la cocina Alberto Durá. Un concepto que combina una moderna elaboración con producto de mercado para ofrecer atractivos menús degustación a muy buen precio.
Para disfrutar con todos los sentidos de una moderna interpretación de la cocina catalana, hay que reservar con antelación en el Cinc Sentits (Entença 60) del cocinero Jordi Artal. Deberán hacerlo con antelación ya que tan solo cuenta con 9 mesas distribuidas en diferentes espacios.
Por último Moments (Passeig de Gracia 38-40). Heredero del que fuera, durante tres décadas, uno de los templos culinarios más reconocidos de nuestra gastronomía, el “Sant Pau” que cerró sus puertas a finales de 2018 en el Maresme. El buen hacer de Carme Ruscalleda y su hijo Raül Balam al servicio de una cocina imaginativa y fresca.
Petit Comité con Nandu Jubany, Ramon Blanch y Melani Sevilla / Guía Repsol
Nos vamos hasta Lleida, al restaurante gastronómico La Boscana. El Chef Jöel Castanyé y su equipo ejecutan con precisión las recetas de una carta inspirada en la cocina catalana contemporánea.
El quinto dos Soles nos lleva hasta Tarragona, concretamente a la antigua cantera de Ulldecona. Allí se ubica Les Moles del cocinero Jeroni Castell y su esposa Carmen Sauch como jefa de sala. Proximidad, técnica y diversión son los fundamentos de sus platos inspirados en la cocina tradicional tarraconense.
Los nuevos
Los nuevos 12 un Sol se reparten por todo el territorio. En Barcelona los buenos platos de Jordi Vila en Al Kostat; la cocina esencial y creativa de Aürt del chef Artur Martínez; a escasos metros de La Boquería la particular cocina tradicional de Albert Raurich en Dos Pebrots; la reputación de Martín Berasategui en Oria; la cultura gastronómica catalana de Nandu Jubany en Petit Comité; la alta cocina de Carles Tejedor en Sofía Be So y los platos ecológicos de Xavier Pellicer.
En Girona la gastronomía ampurdanesa del Castell Peralada y la sabrosa propuesta de Sol Blanc. En Lleida, Josep María Castaño brilla en Malena y en Tarragona el respeto por el producto de Joan y Montse del Celler de l’Arbocet y la experiencia de Ferrán Cerro. Para gustos los sabores.