Los Mossos d'Esquadra han desarticulado un grupo criminal especializado en realizar robos violentos en domicilios. Sus víctimas eran personas con alto poder adquisitivo, en su mayoría de edad avanzada, a las que agredían para robarles dinero y objetos de valor.
El operativo ha permitido desarticular las cuatro células que integraban la organización y detener a estas once personas --siete de nacionalidad española, tres dominicanos y un venezolano--, de las cuales nueve están en prisión preventiva.
Asaltos
La investigación se inició en junio de 2019 tras un asalto violento en el interior de un domicilio de las Franqueses del Vallès. Tres asaltantes entraron en el domicilio y agredieron violentamente a una mujer de edad avanzada con graves problemas de salud y su hijo de 53 años para llevarse dinero, joyas, teléfonos móviles y un vehículo.
Fruto de las pesquisas policiales, los investigadores identificaron uno de los autores materiales del asalto, y lo relacionaron con otro robo de características similares que se cometió en julio en Lliçà de Vall. En esta ocasión uno de los cinco atracadores implicados en el robo fue detenido tras caer del tejado de una casa cercana por donde intentaba marchar. Por su parte, las dos víctimas requirieron asistencia médica y tuvieron que ser trasladadas e ingresadas en el hospital.
Seguimiento
Fruto de la investigación los agentes identificaron y ubicar los integrantes de la organización que habían realizado los asaltos. Así pues, los pudieron relacionar con otros dos robos cometidos con extrema violencia en Reus y en Bigues i Riells.
Los atracadores buscaban víctimas de edad avanzada con un alto poder adquisitivo y realizaban vigilancias previas tanto de los domicilios como de las personas a las que iban a asaltar. Tras evaluar el momento oportuno para realizar el robo, lo ejecutaban utilizando una violencia extrema, incluso en alguno de los casos habían dejado inconscientes a sus víctimas.
Registros
Las detenciones se ejecutaron entre octubre y diciembre de 2019. En dicho periodo, los Mossos también realizaron diferentes entradas en los domicilios de los principales investigados.
Durante los registros se recuperaron tres armas de fuego, más de 7.000 euros en efectivo. Asimismo se encontraron joyas y otros objetos relacionados directamente con los robos investigados, entre otros indicios que implicaban a los detenidos