El termómetro se congela en el primer fin de semana de diciembre

El último mes del año ya está aquí y, con él, viene una bajada de temperaturas generalizada que hará sacar del armario los abrigos, bufandas, guantes y demás complementos invernales hasta a las personas más calurosas. En Cataluña, el frío ha remitido brevemente en las últimas jornadas, pero solo para coger impulso. Una borrasca llegará a la península ibérica durante el primer fin de semana de diciembre y dejará precipitaciones a su paso. 

El termómetro en la comunidad autónoma catalana mantendrá las temperaturas de los últimos días durante el viernes y el sábado, con cambios mínimos que podrían acentuarse en la zona interior y en el Pirineo. No ocurrirá así el domingo, día en el que se prevé una caída de entre dos y siete grados en el territorio. Será entonces cuando la nieve acaparará el protagonismo. 

Viernes de temperaturas suaves

Los cielos nubosos estarán presentes en Cataluña durante las primeras horas del viernes, si bien este fenómeno meteorológico remitirá conforme avance el día. Las nubes se concentrarán, sobre todo en Girona y en la cornisa pirenaica, aunque no se descartan también en la provincia de Lleida. En el resto de la región predominará el cielo despejado con algún intervalo nuboso, sobre todo durante la mañana. 

La temperatura irá ascendiendo con el paso del día y podrán superar los 18 grados en Lleida y en la costa de Barcelona y Tarragona, con algunas ráfagas de viento en el interior de la provincia tarraconense. En los Pirineos, sin embargo, el termómetro se manendrá por debajo de los 10 grados con mínimas que ronden el cero, lo que puede dar lugar a algunas heladas débiles. A últimas horas de la tarde podrían caer las primeras precipitaciones. La cota de nieve se situará alrededor de los 2.000 metros. 

El domingo baja el termómetro

La jornada del sábado no reflejará grandes cambios con respecto a la anterior. La lluvia estará más presente, se extenderá a la zona central de la región y la temperatura será sutilmente más baja. El domingo, sin embargo, sí reflejará un gran cambio en la meteorología, ya que la temperatura caerá de forma acusada. En la costa, las máximas rondarán los 15 grados mientras que en el interior serán algo más bajas y en la zona montañosa del norte no superarán los 8ºC. Las mínimas se situarán en negativo en gran parte de los Pirineos. 

Se esperan precipitaciones durante las primeras horas del día, sobre todo en forma de nieve en el tercio norte. La cota bajará hasta los 1.400 metros y es probable que las heladas se extiendan por el prepirineo. Esto será solo un avance de lo que vendrá en la primera semana de diciembre, en la que se podrían acumular más de 25 centímetros de nieve.