El abad de Monserrat pide perdón y se compromete a "aumentar" los mecanismos de protección a menores

El abad de Montserrat, Josep Maria Soler, ha pedido perdón por los abusos sexuales a menores cometidos por religiosos del monasterio y se ha comprometido a adoptar mecanismos de protección para evitar que se repitan hechos como los ocurridos con el monje Andreu Soler, que actuó como un “depredador” sexual y un “pederasta”.

Durante la homilía del domingo, el abad Soler ha citado el informe hecho público el pasado viernes por la comisión independiente creada por el monasterio. El documento recogía dos nuevos casos de pederastia desconocidos hasta el momento y que fueron cometidos por parte del que fue responsable de la Escolanía, V.T.M., en 1968.

Más mecanismos de control

El abad ha afirmado que, tras conocerse esos casos, en breve, se "mejorarán y aumentarán los mecanismos de protección de menores existentes en Montserrat", aunque no ha precisado cómo. Soler ha afirmado que "Montserrat tiene también sus debilidades y sus pecados", y que el viernes, con el informe hecho público por la citada comisión, se cumplió el compromiso adquirido a primeros de años de investigar las denuncias de abusos "con voluntad de transparencia".

"Hacemos nuestros los resultados de esta investigación y, por ello, quiero expresar, en nombre de mis hermanos de comunidad, nuestra consternación al conocer el mal que se hizo a las víctimas de los abusos así como ver cómo habían fallado los mecanismos de prevención y control", ha dicho el abad.

A disposición de las víctimas

El máximo responsable del monasterio ha vuelto a poner su comunidad "a disposición de las víctimas para acompañarles, si lo desean, en su dolor y en su recuperación emocional".

"Una vez más -ha continuado-, condenamos de una manera absoluta cualquier tipo de abuso a menores, y reafirmamos nuestro compromiso de lucha con firmeza contra una problemática tan grave que afecta a toda nuestra sociedad".