Cataluña ha registrado 47 homicidios o asesinatos en lo que va de año, tres más que las 44 muertes violentas que hubo en la comunidad en 2018.
De igual forma, Barcelona acumula trece homicidios, tres más que los diez que se produjeron en la ciudad a lo largo de todo el año pasado.
Diez fallecidos en el último mes y medio
Según datos recabados por la agencia Efe en base a la estadística de criminalidad de los Mossos d'Esquadra, hasta junio se consumaron oficialmente 37 homicidios o asesinatos en Cataluña.
A esto hay que sumar otros diez registrados en julio y en los trece primeros día de agosto, con lo que la cifra de víctimas mortales en la comunidad catalana se eleva hasta 47, tres más que en todo el pasado año.
Repunte en verano en Barcelona
En la ciudad de Barcelona hubo seis muertes criminales hasta junio, según la web abierta de los Mossos con estadística delincuencial, a los que siguieron otros cinco casos el pasado mes de julio y otros dos en agosto, el último de ellos confirmado este martes: el de una mujer sueca cuyo cadáver fue localizado ayer en Can Tunis, en el distrito de Sants-Montjuïc.
De esta forma, en Barcelona se han registrado trece víctimas violentas hasta agosto, frente a las diez que hubo en todo 2018, según datos de la Secretaría de Estado de Seguridad.
Ciutat Vella, zona caliente
Los dos primeros homicidios registrados en Barcelona este año se produjeron en febrero (uno en Ciutat Vella y otro en Sant Martí), después hubo dos en marzo (en Ciutat Vella y Sant Martí), uno en mayo (Eixample) y otro en junio (Sant-Monjuic).
En julio hubo un crimen mortal en el Eixample, otro en Ciutat Vella, otro en el Port Olímpic, otro en Sarrià y el quinto en el Poble Nou, mientras que en agosto se produjo una pelea mortal en Ciutat Vella y ayer se localizó el cadáver de una mujer en Sants-Monjuïc.
Nueve muertos en marzo y en junio
En enero se registraron cuatro homicidios en toda Cataluña: uno en la demarcación policial de Arenys de Mar, otro en el Camp de Tarragona, otro en Sant Feliu de Gíxols y otro en Pla de l'Estany. En febrero hubo cinco casos: uno en Badalona, uno en Santa Coloma de Gramenet, dos en Barcelona --Ciutat Vella y Sant Martí--, y uno en Cornellà; y en marzo nueve: Badalona, Cerdanyola, Granollers, Alt Camp, Alt Empordà, Ciutat Vella y Sant Martí en Barcelona, Cornellà y Sant Feliu de Llobregat. En abril hubo seis homicidios o asesinatos, en Badalona, Granollers, Alt Empordà, la Garrotxa, Gironès y Selva Interior; en mayo cuatro: en Terrassa, Eixample de Barcelona, Cornellà y Gavà; y en junio nueve: en Cerdanyola, Mataró, Sabadell, Terrassa, Baix Camp, Tarragonès, Sants-Monjuic en Barcelona, Garraf y Gavà.
En julio hubo siete fallecidos: además de los cinco citados en Barcelona, hubo un crimen en L'Hospitalet de Llobregat (Barcelona) y otro en Terrassa (Barcelona) --ambos por violencia machista--. Y en agosto, tres: además de los dos ya referidos en barcelona, el pasado día 11 un hombre de 30 años falleció por heridas de arma blanca en el transcurso de una pelea en el barrio de La Mina de Sant Adrià de Besòs (Barcelona).
Tres heridos con armas en 24 horas
Los últimos crímenes en Barcelona han provocado que se reabra el debate sobre la seguridad en la capital catalana, donde además en las últimas semanas ha habido varias peleas graves, como las tres que se han registrado en las últimas horas, con dos heridos graves por navajazos y uno por objetos contundentes.
El primer apuñalamiento se produjo sobre las 21.45 horas de anoche en el Pou de la Figuera, en el barrio de la Ribera, donde por causas que se investigan un hombre resultó herido de gravedad por arma blanca. Además, esta madrugada, sobre las 05.30 horas, en el Pla de Palau, en el barrio de la Barceloneta, se ha producido una nueva agresión con arma blanca que ha acabado con otro hombre herido de gravedad y trasladado a un centro hospitalario, además del presunto autor detenido. Finalmente, este mediodía también se ha producido una pelea entre tres personas en la calle Sant Rafael, en el Raval, de las que una ha sufrido lesiones leves en una espalda, donde uno de los implicados le ha atacado con una botella rota.