No están locos por seguir los pasos de Cajal, Ochoa o grandes cardiólogos como Fuster. Los médicos con mejores calificaciones prefieren dermatología y venereología. Ha sido la especialidad elegida por tres de los diez mejores y la primera en agotarse de las 6.976 para plazas para cursar el MIR (médico interno residente) en hospitales españoles.
“Dermatología tiene más salidas en la privada porque mucha gente acude a estas clínicas para tratarse. Y no hay casi guardias”, aseguran sus partidarios. El gallego José Manuel Busto, número uno, y que se formará en el madrileño hospital de La Paz dice más comedido: “Es una especialidad muy dinámica, visual y fascinante. Durante las prácticas me sentí supercómodo”.
El doctor José Manuel Busto Lago / FUNDACIÓN INADE
La tendencia por las enfermedades la piel, el órgano mayor del cuerpo humano, se completa con Cirugía Plástica Estética y Reparadora, segunda especialidad favorita de los médicos más talentosos. La estabilidad en la sanidad privada y la ausencia de guardias explican también la predilección.
Pediatría en retroceso
Cardiología es la tercera preferida en el global entre las 40 especialidades, pero su elección entre los cien primeros ha sido la más baja desde 2011, junto con pediatría. También han perdido sex appeal neurología y endocrinología, según el análisis de Vicente Matas, del centro de estudios del Sindicato Médico.
El desinterés por la salud infantil está ligado al duro futuro laboral de los pediatras. Una reciente radiografía de la Asociación Española de Pediatría resume las razones: “Menos sueldo, consultas masificadas y horarios eternos”.
Hospital Universitario La Paz de Madrid / WIKIPEDIA
El rechazo ha llegado a que uno de cada cuatro niños en España es ya atendido por un médico de familia y no por un pediatra. Prefieren los hospitales por sus mejores condiciones laborales. Solo el 29% de los MIR elige los centros de salud y todos esquivan las zonas rurales o remotas.
La Medicina de Familia, los tradicionales “médicos de cabecera”, sigue siendo la menos querida. A la mitad del reparto solo se han cubierto 115 de sus 1.914 plazas.
Madrid, favorito
El reparto de plazas concluirá el próximo 21. Pero los 700 estudiantes con mejor calificación se han decantado por hospitales de Madrid frente a Barcelona. Los salarios base son similares (1.003 y 997 euros mensuales), y en ambas ciudades hay centros de primer orden. Pero pesa la preeminencia y exigencia del catalán para ejercer la profesión y un futuro laboral más incierto.
También esgrimen la falta de sintonía con el procés, constatable en hospitales como el Clínic, tercero mejor de España según los rankings. Según algunas crónicas, este buque insignia de la Sanidad catalana se ha convertido por el Govern en herramienta de propaganda y agitación social.
Entrada principal al Hospital Clínic Barcelona / CG
Incluso ha saltado la sorpresa. El hospital valenciano de La Fe ha desbancado al Vall d’Hebron entre los 700 residentes con mejores notas.
Brecha de género rara
A pesar de ser una profesión cada día más feminizada (el 66,3% de los menores de 55 años son mujeres), de los 20 mejores estudiantes, 15 son hombres. También el 54% de los 700 mejores.
No es nuevo, pero se mantiene la brecha, según los análisis provisionales. El año pasado los hombres coparon el 64% de las 100 primeras posiciones, que aseguran la elección de especialidad y hospital. El año anterior fueron el 69%.
Psicólogos, economistas, investigadores del comportamiento y los propios médicos no encuentran el porqué de la hegemonía masculina. Algunos apuntan que los hombres se arriesgan más que ellas cuando se penalizan los fallos y a factores como la elección de las academias para preparar los exámenes.
Jóvenes médicos se someten a las pruebas selectivas para obtener una plaza de MIR / EFE
Otros barajan la hipótesis de la variabilidad extrema, ésa que establece que los hombres están mucho más presentes en los extremos de la inteligencia. Así, habría más entre los menos inteligentes pero también entre los más brillantes. “Harían falta más datos y estudios”, apunta Luis González, profesor de psicología de la Universidad Autónoma de Madrid.
Embudo sin solución
Con todo, más de la mitad de los 15.000 médicos que se han presentan a la prueba para cursar el MIR no sacan plaza. Mientras, en la Sanidad española faltan especialistas, y sobran estudiantes y facultades de Medicina.
Según la Confederación Estatal de Estudiantes de Medicina (CEEM), en España están en activo 221.470 médicos. Pero solo con los 44.758 matriculados en las 42 facultades se cubrirían las jubilaciones hasta 2030. Ante este embudo, hay dos soluciones: reducir el número de estudiantes o aumentar las plazas MIR. El Gobierno Sánchez tiene decisiones más urgentes y fáciles.