El brunch es un invento inglés que combina lo mejor de dos mundos. La palabra está formada por la unión de breakfast (término inglés que significa 'desayuno') con lunch ('almuerzo' en castellano). El resultado es una comida a medio camino entre estas dos últimas que sirve como alimento casi para el resto del día, teniendo en cuenta que los fines de semana muchas personas prefieren levantarse más tarde que durante el resto de la semana.
En el brunch tradicional se suelen servir tres tipos de platos. Por un lado, la parte salada, donde se incluyen huevos, cocinados de varias maneras (aunque lo más clásico son revueltos o poché), así como varios tipos de pan tostado. Algún tipo de carne o pescado, que suele ser bacón o salmón ahumado y, finalmente, una parte dulce, donde tienen cabida todo tipo de fruta, crepes o tostadas francesas. Todo esto acompañado de bebidas bebidas tanto frías (zumos o algunos cócteles revitalizantes como el Bloody Mary o el Destornillador) como calientes (café o té). Vista esta gran idea para alimentarse, cabe hacer un repaso de los mejores lugares de Barcelona para tomar el brunch.
Brunch & Cake
Uno de los lugares más acogedores que se pueden encontrar en la Ciudad Condal es el Brunch & Cake. Según explican sus creadores, “nuestro último local supone la culminación de un sueño: dar de comer bien y sano en la playa”. Y esto es precisamente lo que hacen en su restaurante de la playa de la Barceloneta.
Su menú se elabora a diario con calma, a mano y a fuego lento. Esa es la filosofía de una tienda y cafetería que ya cuenta con varios locales abiertos. En su brunch se dan cita los platos más trendy, como los bols de desayuno con fruta y cereales, y los más clásicos, como el Bloody Mary, tartas y huevos. Como apunte, hay que recordar que no se hacen reservas, por lo que si alguien quiere probar este almuerzo tendrá que madrugar para probar suerte y encontrar sitio.
B Lounge
Este local es uno de los más conocidos de Barcelona por su terraza giratoria de 360 grados desde la cual se obtiene una panorámica perfecta del barrio del Raval. Por la noche, B Lounge es un lugar de cócteles y raciones muy interesante, pero los fines de semana se transforma para ofrecer uno de los mejores brunchs de la Ciudad Condal.
Si la noche ha sido larga, su menú en el rincón Hangover ofrece varios cócteles en la terraza mirador que constan de su exclusivo Bloody Raval (tomate, jengibre, pimienta, vermú y vodka) y del conocido Mimosa (champán con zumo de naranja natural). Una bienvenida de lujo antes de probar su bufé que incluye varios tipos de café y té, una gran variedad de cruasanes, tartas y muffins, zona vegana con lechugas de temporada, tomate de huerta, crudités y gazpacho, una zona especial de quesos y otra de brochetas de fruta y smoothies.
The Benedict
Pero si lo que se busca es un auténtico brunch tradicional inglés, la mejor opción es acudir The Benedict. Su menú consta de un plato principal (con varios tipos de huevos y tortillas, así como ensalada césar), dos bebidas (caliente y fría) y un postre (donde los pancakes y el chocolate cobran protagonismo). Una gran manera de empezar cualquier mañana, ya que ellos lo sirven toda la semana de manera ininterrumpida.