Un hombre vestido de Spiderman lucha contra la delincuencia en Barcelona

Barcelona tiene su propio superhéroe, aunque tenga la apariencia de los que realizan sus hazañas en las ciudades de Estados Unidos. Un vecino de la localidad ha decidido "hacer el bien" por las calles de la ciudad vestido como Spiderman, el personaje de Marvel que lucha contra la injusticia y la violencia en Nueva York.

La actividad del hombre-araña barcelonés se dirige a los aspectos más básicos de la convivencia para mejorar el bienestar y la imagen de la ciudad a través de pequeñas acciones sociales. Por ejemplo, se dedica a alimentar a los gatos callejeros de la capital catalana, ofrecer pequeños regalos a niños y animar a las personas que se encuentran viviendo en la calle. Incluso, según publica Metrópoli Abierta, ha conseguido atrapar a un ladrón que había robado un móvil. Y todo ello, disfrazado como Spiderman.

La inseguridad en Barcelona

Cuando se topa con la delincuencia callejera, este superhéroe anónimo se lo toma muy en serio, algo de agradecer en una ciudad en la que el mayor problema que sufren sus habitantes es el de la inseguridad. Admite que en el incidente del hurto del teléfono móvil se encontraba "muy nervioso" pero que supo adaptarse a la situación y acabó por devolverle la pertenencia a su legítima usuaria. "Fue bastante sencillo, no hubo pelea y el chico era un tipo razonable", explica. 

spiderman barcelona regalo

El Spiderman de Barcelona da un regalo a una niña por la calle / SPIDEY BCN

Eso sí, su aspecto le ha hecho pasar algunos apuros frente a las autoridades. Una vez tuvo que dar explicaciones a unos agentes que le encontraron mientras daba de comer a unos animales callejeros. La cosa podría haberse complicado, ya que no llevaba el DNI, pero los policías sucumbieron la buena voluntad que el Spiderman barcelonés lleva por bandera y acabaron por hacerse, inculso, una foto con él.

Un blog para explicar sus hazañas

El superhéroe da a conocer sus pequeñas obras sociales a través de una web que utiliza a modo de diario. No siempre le ha sido fácil ayudar a los viandantes de Barcelona, como él mismo expone en una de las publicaciones de la página, sobre todo por su aspecto. "Nadie parecía necesitar ayuda, fui a un supermercado por si podía ayudar con las bolsas o algo pero no había mucha gente", escribe, "estoy un poco decepcionado, y quizás me ha puesto un poco triste que me dijeran que daba miedo, no se si es por mi tamaño pero al ponerme el traje doy miedo". 

Sin embargo, en cada acción que realiza --ya sea exitosa o no-- el misterioso Spiderman de Barcelona se muestra confiado y alegre en cada pequeño gesto que recibe. Por ejemplo, explica que, en una de sus salidas, "me encontré varias personas que se hicieron fotos conmigo y bastantes niños se alegraron de verme. De eso saco lo positivo de este día". En declaraciones al medio de comunicación digital, asegura que su objetivo es "realizar buenas acciones, hacer feliz a las personas, ayudar".