La patronal de grandes constructoras y concesionarios Seopan propone establecer “peajes inteligentes” en el acceso de las grandes ciudades españolas como Barcelona o Madrid. Según sostiene, la articulación de estos peajes supondría un recorte en la contaminación y atascos de hasta un 50% en hora punta.
La estimación que baraja la entidad sostiene que esta medida contribuirá a reducir en hasta un 15% las emisiones de CO2 además de ahorrarnos hasta 150 horas anuales en atascos.
Decisión de los conductores
Este sistema de "peajes inteligentes" consiste en articular un cobro de peaje solo en alguno de los carriles de las vías de acceso. Los conductores en función de la fluidez o no del tráfico serán los responsables de decidir circular o no por ellos. La tasa de peaje será flexible, de modo que el peaje es más caro cuando hay más tráfico. Este sistema ya funciona en varias autopistas de acceso a ciudades como Texas (Estados Unidos).
Uno de las posibles ventajas, resalta la propuesta, es conseguir reducir las horas de atasco que todos los ciudadanos de las grandes ciudades sufren cada día. Un estudio realizado por DriveSmart el pasado abril revelaba que los barceloneses emplean entre una hora y una hora y media cada día en sus coches o el transporte público para desplazarse hacia el trabajo. Doce días y medio al año, 330 horas, los barceloneses “pierden” tiempo en sus viajes hacia sus puestos de trabajo.
El reto de las grandes urbes
La patronal constructora lanza la propuesta coincidiendo con el gran reto de reducir la contaminación y tráfico en estas grandes ciudades. La contaminación atmosférica, según subraya la Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea), provoca 3,3 millones de muertes al año en el mundo y el tráfico es una de las principales causas. En España, la cifra de muertes anuales por esta causa se cifra en unas 30.000.
El estudio publicado por Fedea realizado por Xavier Fageda resaltaba que estas medidas de implantar peajes tienen por objetivo la reducción de la contaminación. Además, recalcaba que el sistema es sencillo de diseñar e implementar y que podrían destinarse a la mejora del transporte público. Ricardo Flores, de la Universitat Rovira i Virgili, otro de los autores del estudio que afirma que establecer un peaje barato es una medida más eficiente y eficaz que las restricciones cuantitativas al tráfico implementadas en las ciudades.