A Cataluña hay muchas formas de llegar. Se puede utilizar un vehículo para ir por carretera, un avión para llegar por los aires o un barco surcando las aguas. Y es que en la región hay actualmente más de cincuenta puertos y clubes náuticos por los que año tras año pasan millones de viajeros.
Pero, ¿cuáles son los grandes puertos de Cataluña? Están situados en Barcelona y Tarragona:
Barcelona. Es el primer puerto de cruceros de Europa. En 2017 los cruceristas que pasaron por él superaron los 2,7 millones. La seguridad, la calidad del servicio, el atractivo de la ciudad y de Cataluña, y la proximidad del aeropuerto son las razones por las que la práctica totalidad de los cruceros que navegan por el Mediterráneo occidental hacen escala en Barcelona. Cabe destacar las líneas regulares de ferris que operan desde las tres terminales habilitadas para ello, desde donde establecen conexiones con Roma, Livorno, Cerdeña, Génova, Tánger, Túnez y Argel. Desde el punto de vista de las mercancías, actualmente, desde el muelle de Ponent hasta el Sud, todos ellos tienen acceso ferroviario.
Palamós. El puerto de Palamós ha ido consolidando año tras año su proyección como punto de parada de cruceros y actualmente es el segundo de Cataluña después del de Barcelona. En 2017 recibió 39 cruceros que transportaron unos 38.000 pasajeros, quienes aprovecharon para visitar los lugares de mayor interés de la Costa Brava. La construcción de una aduana posibilita el desembarco de cruceristas procedentes de fuera de la zona Schengen.
Roses. El puerto de Roses, después de haberse incorporado hace poco tiempo como escala de cruceros, sigue con su progresión como destino en el norte de la Costa Brava. Este puerto y el de Palamós se promocionan bajo la marca Costa Brava Cruise Ports. El objetivo de este plan de promoción es potenciar el tráfico de pasajeros de cruceros y fomentar el desarrollo de la oferta turística vinculada a este turismo, tanto de este municipio del Alt Empordà como de la Costa Brava en general. Actualmente hay diez compañías de cruceros con barcos que no sobrepasan los 150 metros de eslora que tienen el puerto de Roses como destino.
Tarragona. El puerto de Tarragona está muy bien posicionado en cuanto al tráfico de mercancías se refiere y es un referente entre los puertos del sur de Europa. Con unas buenas instalaciones y ubicado en una zona de gran atractivo turístico, dispone de un muelle exclusivo para el tráfico de cruceros ubicado en el dique de Levante, en el que pueden atracar simultáneamente dos embarcaciones. Cuenta, además, con la marina Port Tarraco para cruceros de menor dimensión.
Sant Carles de la Ràpita. Esta población de las Terres de l’Ebre recibe en verano al Star Flyer, un lujoso velero de cuatro palos. Con cerca de un millar de pasajeros, realiza seis escalas durante la temporada estival.
Vilanova i la Geltrú. Este puerto situado a 40 kilómetros de Barcelona, justo en el centro del litoral catalán, dispone de las instalaciones portuarias, servicios y accesos adecuados para facilitar la llegada de pequeños cruceros en ruta por el Mediterráneo.