El exduque de Palma Iñaki Urdangarin dispone hasta el próximo lunes para ingresar de forma voluntaria en la cárcel, tal y como le ha comunicado la Audiencia Provincial de Baleares tras personarse en las dependencias judiciales, pasadas las 12.15 horas. Diez minutos después, el marido de la infanta Cristina abandonaba el edificio con el mandamiento de prisión, acompañado de su abogado, Mario Pascual Vives, y eludiendo hacer declaraciones a los medios.
Urdangarin ha hecho acto de presencia en medio de una amplia expectación más de tres horas después de que lo hiciera su exsocio, Diego Torres, a quien la Audiencia ha concedido el mismo plazo --cinco días—para que entre en prisión. Mientras decenas de personas le recibían a gritos de “chorizo”, el yerno de Felipe VI ha descendido del Nissan Juke gris que le ha conducido hasta la Audiencia y se ha introducido en el edificio para recibir el requerimiento.
Podrá volver a Suiza
Durante estos cinco días, Urdangarin podrá volver a Suiza y ultimar su ingreso en la cárcel puesto que el tribunal de la Sección Primera, que le juzgó en 2016 junto a otros 16 acusados --incluida su mujer-- en el marco del caso Nóos no ha adoptado ninguna medida cautelar contra él.
El condenado ha recogido el mandamiento un día después de que el Tribunal Supremo hiciese pública la sentencia definitiva del caso Nóos, que rebaja de los seis años y tres meses a los cinco años y diez meses la pena que la Audiencia le impuso en febrero del pasado año.
Por su parte, Torres ha comparecido a las nueve en el órgano judicial para hacerse acopio del requerimiento, en su caso para cumplir cinco años y ocho años de cárcel. El expresidente del Gobierno balear y exministro Jaume Matas, condenado a tres años y ocho meses, también ha sido citado esta mañana en el marco de una macrocausa cuyas pesquisas pusieron el foco, en 2010, en las actividades irregulares desplegadas, a través del Instituto Nóos, por el marido de Cristina de Borbón.
Jaume Matas ingresa hoy
Sin embargo, no se ha presentado. Su abogado ha informado que hoy mismo ingresará en la prisión de Aranjuez, sin esperar los cinco días que le habría autorizado la Audiencia, para empezar a cumplir su condena por prevaricación en concurso continuado de malversación de caudales públicos con los atenuantes de confesión y reparación del daño.
Será la segunda condena del exministro, quien ya había cumplido nueve meses en el presidio de Segovia sentenciado por tráfico de influencias en el caso Palma Arena.
El exlíder del PP balear acumula a sus espaldas un total de siete condenas por corrupción --la ejecución del velódromo Palma Arena, considerada su infraestructura estrella, ha acabado convirtiéndose en su principal tormento judicial-- y volverá a sentarse en el banquillo al menos en dos ocasiones: por favorecer de forma irregular a la empresa Over Marketing, hechos por los que la Fiscalía reclama cinco años de cárcel contra él, y por auspiciar la adjudicación ilegal de la construcción del hospital de referencia de Baleares.