El buque Aquarius, en el que viajan más de 600 personas abandonadas a su suerte en el Mediterráneo, descarta viajar a España por la inseguridad que generaría un viaje de entre tres y cinco días hasta Valencia.
El Gobierno español ha ofrecido como alternativa el puerto de Palma de Mallorca, más cercano a la localización de la nave.
Mal tiempo
Analise Borges, la enviada especial de Euronews, a bordo del barco, ha explicado que las condiciones meteorológicas empeorarán en los próximos días y la previsión es que el trayecto hasta Valencia, de más de 1.300 kilómetros, se prolongue entre tres y cinco días.
La ONG SOS MEDITERRANEE se ha considerado que este viaje supondría un riesgo para todos los que están a bordo. "Es inseguro para el barco, para la tripulación y para la gente rescatada", ha señalado.
Desembarco inmediato
Médicos Sin Fronteras (MSF) han reclamado que se permita el desembarco inmediato de los 629 migrantes rescatados en el Mediterráneo y ha expresado su preocupación por la posibilidad de que el buque tuviera que desplazarse hasta Valencia, ya que ello supondría reducir notablemente la capacidad de respuesta ante un posible nuevo naufragio.
MSF ha expresado su "preocupación" por la seguridad de los migrantes rescatados que están a bordo del Aquarius, entre ellos "enfermos, heridos, mujeres embarazadas y menores".
En particular, ha subrayado que "un viaje de tres días a Valencia en un barco que supera su capacidad máxima es inseguro". Además, recuerda que el buque aún necesita instrucciones formales de los Centros de Coordinación de Rescate Marítimo de Roma y Madrid.