La mecha no son disparos, son palabras...

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Vida

Ana Julia confiesa que mató al pequeño Gabriel

La única detenida por la muerte del niño de ocho años en Almería ha accedido a colaborar con la Guardia Civil en su última declaración

13 marzo, 2018 15:40

Ana Julia Quezada ha confesado que ella mató a Gabriel Cruz. La mujer de 43 años detenida por su presunta implicación en la muerte del niño de ocho años ha prestado declaración ante los agentes que llevan la investigación en la Comandancia de la Guardia Civil durante casi de dos horas, y finalmente ha explicado que discutió con el niño y decidió golpearlo con la parte roma de un hacha. 

Quezada ha reconocido que discutieron y le dio un mal golpe en la cabeza al niño y luego lo asfixió. En estos momentos, la acusada acompaña a la Guardia Civil a un vertedero donde supuestamente habría tirado la ropa de Gabriel. 

Los investigadores del 'caso Quer'

Ana Julia ha sido interrogada durante casi dos horas por los investigadores de la UCO (Unidad Central Operativa de la Guardia Civil). Los agentes, son los mismos que lograron la confesión del asesino confeso de Diana Quer, El Chicle. 

Tras la declaración, la abogada de Quezada, Beatriz Gámez, en colaboración con el letrado Esteban Herández-Thiel, no han precisado si su defendida habría reconocido que ocultó el cuerpo de Gabriel en la finca de Rodalquilar. Tampoco se ha aclarado si la acusada actuó sola o ha tenido algún tipo de colaboración.

Presunta discusión con el niño 

La abogada ha detallado que en la declaración, Ana Julia ha explicado lo que ocrurrió aquel 27 de febrero cuando desapareció Gabriel. Ha dicho que la tarde del crimen salió de la casa después de Gabriel, se lo encontró y le dijo que le acompañara a la finca de Rodalquilar. Cuando llegaron allí se produjo una discusión, según sus palabras y el niño la agredió. Ana Julia respondió dándole un golpe con la parte roma de un hacha, lo que que le dejó inconsciente. 

Ella se asustó, según palabras de la abogada, y lo mató asfixiándolo. Una vez muerto Gabriel, Ana Julia le quitó la ropa, la arrojó en un contenedor lejano y enterró el cuerpo en una fosa que cavó esa misma tarde junto al aljibe. La Guardia Civil sospechó desde el primer momento de la pareja del padre de Gabriel, pero pidió a Ángel Cruz que disimulara para continuar con las pesquisas sin levantar sospechas.

De momento, y por instrucción del magistrado a cargo del caso, el cuerpo del pequeño Gabriel no será incinerado y posiblemente deba someterse a una segunda autopsia