La Policía Nacional ha detenido a tres jóvenes acusados del asesinato de Vicente Soler Romaguera, un médico valenciano que fue encontrado muerto en su domicilio el 7 de diciembre de 2016. El cuerpo de la víctima fue hallado en el salón de su casa, desnudo y atado a una silla con una bolsa de plástico en la cabeza y con multitud de golpes y heridas por todo el cuerpo.
Tal y como apuntan fuentes policiales, los tres jóvenes solían frecuentar la casa del médico donde éste les ofrecía cocaína a cambio de mantener relaciones sexuales. Para el médico jubilado era habitual celebrar pequeñas fiestas donde reinaba el sexo, el alcohol y las drogas, algo que utilizó como arma de seducción para persuadir a estos tres jóvenes de origen rumano hasta su domicilio. Soler fue arrestado y juzgado en 1995 por su presunta relación con la mayor red de distribución y producción de pornografía infantil desmantelada hace más de dos décadas en tierras valencianas, aunque según los agentes de homicidios de la Policía Nacional, el móvil del crimen no guarda relación con aquellos hechos.
Aviso de un vecino
El cuerpo de Vicente fue hallado sin vida después de que su vecino del piso de abajo alertara al administrador de fincas que sufría humedades procedentes del piso de Vicente, pero que tras mucho intentarlo había sido imposible contactar con él. Cuando ambos hombres entraron a la vivienda, se encontraron el piso encharcado de agua y a Vicente sin vida. Las paredes de la vivienda y el techo estaban llenos de sangre, algo que los investigadores han calificado como un "cruel castigo" donde los agresores se ensañaron con el hombre. Además, el domicilio había sido saqueado; la caja fuerte estaba vacía y tampoco se encontró droga en el domicilio.
Según fuentes policiales, los agresores torturaron a Vicente para conseguir información sobre donde escondía el dinero y la cocaína con la que supuestamente trapicheaba, además de obligarle a decir el número pin de su tarjeta para sustraer dinero de su cuenta bancaria. Una vez consiguieron dicha información asfixiaron a la víctima con una bolsa de plástico y se dirigieron a un cajero en Alzira para sustraer el dinero, algo que ha sido una pieza fundamental en la investigación para localizar a los sospechosos.
Huida de España
Justo un año después de acabar con la vida de este médico jubilado y de que los sospechosos huyeran del país tratando de eludir su detención, la Policía Nacional ha arrestado a los dos presuntos autores materiales del crimen y a un tercero por su presunta implicación directa en los hechos acusados de los delitos de asesinato y robo con violencia. Los dos jóvenes que presuntamente torturaron y asfixiaron a la víctima tras colocarle una bolsa de plástico en la cabeza atada con una correa fueron capturados en Rumania y Reino Unido a finales de diciembre.
Estos dos acusados, de 20 y 23 años, ya han sido extraditados a España y prestaron declaración -uno de ellos mediante videoconferencia desde la cárcel de Soto del Real, Madrid,- la semana pasada ante el Juzgado de Instrucción número tres de València, encargado del caso, por el homicidio de Vicente Soler. Ambos se encuentran desde entonces en prisión provisional después de acogerse a su derecho a no declarar, según indicaron fuentes jurídicas.
El tercer implicado en el asesinato, de 21 años y también de nacionalidad rumana, fue arrestado el pasado 11 de diciembre en el barrio en Valencia. Este también se negó a declarar ante los agentes y una vez puesto a disposición judicial negó su participación en los hechos y su presencia en el domicilio la noche del asesinato, aunque sí incrimino a los otros dos detenidos. En cuanto a su relación con el médico confesó que acudía al piso a comprar cocaína, pero que nunca tuvo una relación más allá con el médico.
Respecto a los motivos por los que huyó del país al día siguiente de que fuera descubierto el cadáver de Vicente Soler, argumentó que tenía ya el billete sacado a Manchester, Reino Unido, porque había encontrado un empleo en un fábrica de la ciudad inglesa.