Ciudadanos fiscaliza al cerdo ibérico

Ciudadanos quiere información sobre la protección impulsada por el Gobierno de Mariano Rajoy a la raza de cerdo español con más pedigrí dentro y fuera del país, el ibérico. El diputado Toni Cantó ha registrado una batería de preguntas entre las que hace referencia, entre otras cuestiones, a la inclusión de ejemplares hembra de este tipo de puercos en el Libro Genealógico de la raza ibérica durante el pasado 2015.

Levantó polvareda en el sector. Fijar las características de los animales es básico para proteger la excelencia de la raza y de los productos que se obtendrán de ellos. En los últimos años los criadores con mayor renombre han denunciado que se habían relajado las condiciones mínimas para fijar el estándar, con el impacto que ello tiene en la calidad final.

Debate abierto en el sector

Además del estudio genético que deben pasar, el cuidado de los cerdos ibéricos son caros, desde la alimentación a las condiciones de pasturaje y los recintos donde duermen. Rebajas en la crianza tiene su reflejo en los productos, por lo que consideran que deberían perder el nombre de ibérico para no dañar el prestigio de la marca.

El debate está abierto y Ciudadanos participará activamente en él. El partido de Albert Rivera estima que en 2014 se llegaron a calificar con la distinción 80.000 hembras, inscritas todas ellas en el libro que gestiona la Asociación Española de Criadores de Cerdo Ibérico (Aecerber).

Debate genético

La primera queja del partido es el presunto “doble rasero” para otorgar la distinción entre machos y hembras. Denuncia que las cerdas pueden ser inscritas sin reconocer la pureza conocida, como mínimo, desde su abuelos como sí ocurre con los ejemplares masculinos.

“Vulnera las formalidades doctrinales del libro”, lamenta la formación naranja, y “deja en la más absoluta indefensión al colectivo de los animales con un 100% de fidedigna pureza genética”.

Listado de 23 preguntas

Por ello quiere saber si el libro recibe algún tipo de financiación pública y si no se produce una “contaminación genética de otras razas” con la incorporación de las cerdas con un simple control visual de su morfología. Señala que de forma sorpresiva han “aflorado” estas 80.000 hembras “privadas incomprensiblemente de pasaporte genético hasta entonces” durante 2014.

El Gobierno deberá responder 23 preguntas.