Es la privatización de la que nadie habla en Cataluña. La Consejería de Salud deriva más pacientes de la sanidad pública a la Clínica Girona, un centro concertado, mientras se ceba con el Hospital General. El centro médico gerundense atendió a 768 personas procedentes del sistema público hasta junio. La cifra sitúa el nivel de concertación en el 63%, por lo que si se sigue a este ritmo superará la marca anotada el año pasado.
"Mientras no esté hecha la ampliación del bloque quirúrgico del Hospital Josep Trueta, será necesaria la colaboración con la Clínica Girona para poder mantener la actividad quirúrgica al menos en los niveles actuales", ha indicado una portavoz del departamento que comanda Toni Comín.
La representante ha agregado que la intervención en el Trueta --100% público-- está en fase de Plan funcional, y su ejecución se estima en 12 millones de euros. Mientras se busca el dinero, la Consejería envía pacientes de cirugía menor o media complejidad al centro concertado.
"Hospital infrautilizado"
Los sindicatos discrepan de la versión ofrecida por Comín. "El Hospital Josep Trueta está infrautilizado. Se podrían programar operaciones por la tarde y así drenar las listas de espera", apunta CCOO, mayoritario en el sector.
La agrupación reconoce que los quirófanos del centro necesitan una renovación, pero emplaza a utilizarlos de forma intensiva gradualmente. "Por la tarde apenas hay actividad. Alguna programación y urgencias, pero poco más", agrega.
Ampliación sin fecha
El consejero de Salud, Toni Comín, confirmó en agosto que invertiría 12 millones de euros en ampliar las salas de operación del hospital de referencia en Girona, que trata a unas 840.000 personas. No obstante, el conseller eludió poner fecha a la obra.
En total, el hospital dispone de once quirófanos. Ocho de ellos son para cirugía programada, dos para cirugía urgente y uno para cirugía menor.
En los próximos días, el republicano visitará la ciudad y se espera que dé más detalles sobre la ampliación del ala quirúrgica.