La operación salida que vive Madrid en agosto provoca una estampa poco atractiva de la capital, en la que se hace más visible la cantidad de indigentes que ocupan los bancos, plazas, cajeros y parques de la ciudad.
Este es un problema que se arrastra desde los gobiernos del PP, pero que tampoco ha encontrado una solución efectiva bajo el Ejecutivo de Manuela Carmena. La concejalía de Equidad del Ayuntamiento de Madrid asegura a Crónica Global que “no hay novedades sobre las personas sin techo” ni tampoco un mayor número de “incidencias registradas por parte de la Policía local”.
Poca transparencia
Al preguntar a la Policía municipal por los datos más actualizados respecto a intervenciones policiales o por las quejas sobre las condiciones del mobiliario urbano, ésta nos remite a la web del ayuntamiento y asegura que “la policía no dispone de estadística en cuanto a actuaciones con indigentes”.
En la web del consistorio, sin embargo, tampoco se encuentran muchos de los datos a este respecto. “Muchos datos no se dan a los medios”, replican desde el equipo de prensa del ayuntamiento cuando se les pregunta sobre cifras concretas sobre el número de personas sin hogar, la limpieza en las calles y el estado del mobiliario urbano. En esta línea, añaden que para conocer los detalles más recientes de la red de albergues se debe esperar hasta los meses de invierno. “Hay plaza en los albergues, lo que pasa es que en verano mucha gente prefiere dormir en la calle”, apostillan.
Asimismo aseguran que en las zonas "donde suele dormir más gente y se les ha echado, no han vuelto”.
Altas temperaturas
Las altas temperaturas de la ciudad es lo que provoca que muchas de las personas sin hogar, que durante el invierno se alojan a la red de albergues públicos, estén asentadas en el centro de la capital.
Desde uno de los centros de la red de albergues municipales, La Rosa, explican a este medio que su centro “está lleno”, también en agosto: “Son 30 plazas normalizadas con pernoctación y 30 que solo son centro de día, con el servicio de comida, aseo y demás”, añaden.
La zona sur del centro de la capital es la más afectada por los indigentes que ocupan la vía pública. En uno de los puntos más populares para tomar una caña del Madrid castizo, en el barrio de La Latina, conviven turistas mochileros con indigentes. Se ponen a dormir en medio de la calle y, a veces, obstruyen el paso sin dejar acceder a los cajeros durante horas. (En la imagen que publicamos se ve uno de los cajeros más céntricos de La Caixa, en Gran Vía de San Francisco, con una indigente con latas de alcohol).
Imagen turística
Desde el consistorio insisten en que no ha habido más incidencias, y que lo que pasa es que “hay más mochileros”. Este turismo low cost, junto a los indigentes ocupando la vía pública, juega en contra de los esfuerzos que hacen desde la región --y especialmente desde el Departamento de Turismo, liderado por Carlos Chaguaceda-- por atraer un turismo de mayor calidad.
Esta es una cuestión que también ha subrayado la Alianza por la Excelencia Turística, Exceltur, sobre las inconveniencias de recibir una saturación de turistas que, además, se dejan de media poco dinero en nuestro país. Tampoco ayuda ver cómo algunos de los enclaves más populares de la ciudad están en malas condiciones debido a su uso indebido.