Amenazó a
La casa de lenocinio ocupa el local de la antigua discoteca Karamba en la calle Beethoven de la ciudad. El espacio, tal como confirmó el consistorio recientemente, conserva la licencia de discoteca y cumple con toda la regulación. Quizás por ello, los intercambios se practican en otro lugar.
"Se lleva a los clientes en furgonetas Volkswagen a dos pisos de la calle Bruc y Compte Borrell. No hay sexo en el interior del local. Es todo limpio", explican fuentes del sector.
Comisiones
Además de transporte propio, como ya avanzó este diario, el burdel practica una generosa política de comisiones, según las mismas fuentes. "La entrada cuesta 20 euros. Los taxistas se llevan 120 de mordidas por cada cliente. Está reventando precios", agregan las fuentes consultadas.
Por lo que respecta al personal, Balcells habría contratado a mujeres de otros clubes. "A 20 de ellas se las ha llevado de locales de la zona alta. Va a hacer daño", acusan.
Conflicto
En efecto, el lupanar del empresario, detenido en 2014 por supuesto blanqueo de dinero procedente de la prostitución, ha levantado ampollas. "No son solo las comisiones, que hacen imposible competir. Es que ha abierto el local muy cerca del club Bacarrá, cuyo dueño es enemigo acérrimo de Balcells", subrayan los profesionales consultados.
Así, la presencia de dos prostíbulos en una zona bien de Barcelona, muy próxima al Turó Parc, podría alterar el débil equilibrio del silente negocio en la Ciudad Condal. "Es difícil pensar en una coexistencia. La política agresiva de comisiones y el hecho de que trate de robar clientes al burdel vecino no serán factores de pacificación", explica un profesional conocedor del sector.
Golpe de mano
El golpe de efecto de Balcells es doble. El antiguo gerente de Night Beach y Fuego, clausurados por la policía en el momento de su arresto, expande negocio. "Su show club de la calle Viladomat se le queda pequeño. Por si fuera poco, ha escogido un local que el dueño de Bacarrá vendió hace años. Ha hurgado en una herida antaño cerrada".
Además de la nueva aventura empresarial, el emprendedor de la lascivia ha sacudido el mercado con sus impagos. "Balcells se mete en un proyecto cuando aún debe 100.000 euros de alquiler a una marca de meublés de la ciudad. Los dejó a pagar tras la redada. La nueva inversión no ha sentado bien".
Investigado
Cabe recordar que el Blue Night ha sido recibido con una fuerte oposición vecinal. Los residentes lamentan que se añada más oferta de sexo de pago en una zona en la que ya hay otro disco-show, el Bacarrá.
Asimismo, el prostíbulo abre en pleno debate sobre la regulación del trabajo sexual en la ciudad. Con los partidos confrontando ideas sobre cómo lidiar con el asunto, el empresario se ha avanzado y ha tomado posiciones.