Las regurgitaciones del proceso pasan a un segundo plano, de las portadas al esófago. Es tal la vaguedad, la inconcreción, el hastío y la repetición, que los diarios de Madrid y dos de los cuatro Barcelona se decantan por otros expedientes, como las tarjetas negras de Caja Madrid (El Mundo y El País), la nueva fiscalidad en la venta de viviendas de segunda mano que pretende Montoro (Abc), las crecientes denuncias contra los Pujol (La Razón), la recuperación de la enfermera del ébola, Teresa Romero (El Periódico) o el apoyo de Obama a los pasmergas kurdos contra el Estado Islámico (Ara). Sólo La Vanguardia y El Punt-Avui se mantienen fieles al libreto estomagante de Mas, Junqueras, Forcadell y sus escacharrantes peripecias en torno a la consulta ñapa, trucha o de matute del 9-N. Según el segundo, habrá más mesas, muchas mesas, para votar ese domingo. En el diario de Godó, en cambio, lo que ayer era el camino inevitable hacia las elecciones anticipadas se torna hoy en que "CiU corrige a Forcadell y le recuerda que convoca Mas". Menudo ejercicio de autoridad el de Mas en las últimas semanas...
Rodrigo Rato es el nombre más repetido en las primeras planas. Ha resuelto pedir la baja temporal de militancia del PP mientras Miguel Blesa, el rostro de Caja Madrid durante los locos años del ladrillo, pretende tirar de la aseguradora para que le pague la fianza. Fenomenal estrategia. De lo que se trata es de que el pague otro, el último, aquel, nosotros. Blesa está poniendo al descubierto los fundamentos del negocio bancario, que no son las matemáticas, sino un estilo de vida, como el de Pujol, del que es fama que jamás ha pagado a nadie un café. Ni los suyos.
En El Mundo, que presenta variaciones en el diseño, se asegura que "Anticorrupción investiga el pago de seis millones de Lazard a Rato". Informa, disecciona y traduce Carlos Segovia: "La Fiscalía Anticorrupción no da credibilidad por ahora a la versión del ex presidente de Bankia, Rodrigo Rato, sobre el ingreso que recibió de Lazard y estudia qué nuevas diligencias practicar para esclarecer el caso, según confirmaron fuentes de la investigación. Se trata de los seis millones de euros que Rato percibió en 2011 del banco de inversión francoestadounidense en un momento en que Bankia -y antes Caja Madrid- estaba adjudicando contratos precisamente a esta entidad. Rato fue director gerente de inversiones en Lazard durante los años 2008 y 2009. En enero de 2010 dejó el grupo para ser nombrado presidente de Caja Madrid y, un año después, de Bankia. Uno de los fiscales Anticorrupción que sigue el caso, Alejandro Luzón, preguntó el pasado jueves a Rato sobre este ingreso, aprovechando su declaración como imputado por el escándalo de lass tarjetas de crédito opacas de Caja Madrid y Bankia. Rato respondió que el pago de 2011 obedece a que ejecutó unas opciones sobre acciones procedentes de años antes en su etapa como ejecutivo de Lazard. La Fiscalía Anticorrupción no da por ahora total credibilidad a esta versión y quiere verificar si es cierta".
En El País y sobre el caso particular y propiamente catalán destaca el editorial, que desentraña la estrategia de Mas. En casa Prisa ya se han percatado y lo dicen: "Cada día está más claro. Lo que se dirime en Cataluña apenas tiene nada que ver con un referéndum, o consulta, o votación sobre la independencia. Obedece, al contrario, al intento de Artur Mas de mantenerse en la presidencia de la Generalitat, ganando tiempo. Propósito que, para materializarse, exige colocar toda una serie de piezas en un tablero que fragüe el escenario electoral más conveniente: el mayor victimismo posible; la selección de la fecha más adecuada para hacer olvidar el caso Pujol y otras desgracias; la permanente ocupación del espacio político-mediático. El problema es que algunas de las piezas son contradictorias entre sí. Taponar los asuntos de la familia del expresidente Jordi Pujol, por ejemplo, exigiría unos plazos largos que casan mal con la necesidad inmediata de excitar las expectativas y el ánimo del segmento de población más radicalizada".
El caso Pujol es la sustancia de La Razón de hoy. "La Fiscalía investiga denuncias contra Pujol de nacionalistas arrepentidos" es el titular de la portada. J. M. Zuloaga firma la entrega, que arranca de este modo: "Decenas de ciudadanos catalanes, muchos de ellos nacionalistas arrepentidos, se han dirigido a la Policía para ofrecer datos sobre las presuntas actividades ilícitas de la familia Pujol Ferrusola, entre ellos, el "patriarca" del "clan" en el asunto Banca Catalana. Otros aportan informaciones sobre el cobro del 3% para la adjudicación de obras. Mientras, España firma un acuerdo con Andorra, donde los Pujol transfirieron quinientos millones de euros, para recuperar bienes intervenidos en operaciones contra delitos económicos..."
"Nacionalistas arrepentidos", sugerente asociación. Marta Ferrusola les llama traidores en la intimidad. Su marido se ha trasladado a los bajos del "pisito" (que son dos) de General Mitre, según contaba La Vanguardia. En Abc, Melchor Sáiz-Pardo, da la última hora del menor pero no menos importante miembro de la saga Pujol Ferrusola: "La Unidad contra la Delincuencia Económica y Fiscal y la Fiscalía Anticorrupción han puesto en los últimos días en su punto de mira a Oleguer Pujol Ferrusola, el pequeño de los siete hijos del expresidente catalán. Las alarmas han saltado después de comprobar que el empresario acaba de refugiar su telaraña de sociedades internacionales tras una nueva firma radicada en Luxemburgo.La empresa en sí se llama Ziloti Holding Sarl y fue creada el 13 de noviembre de 2013 con sede social en el 7 de la rue Robert Stüemper de la capital luxemburguesa. Solo días después del nacimiento de Ziloti, la empresa se hizo con el 100% de Samos Servicios y Gestiones, la empresa con la que Oleguer Pujol compró en 2007 un total de 1.152 oficinas del Santander y varios inmuebles históricos en Madrid".
¿Ziloti Holding?. Una "empresa en sí" o lo que viene siendo una empresa.
21 de octubre, Úrsula, Hilarión, Cayo, Dasio, Celina, Asterio, Alodia, Viator y Zótico.