Ya es oficial: este es el pueblo de la Costa Dorada que escoge Europa como ejemplo para la recuperación de sus playas

Calafell lleva años apostando por soluciones basadas en la naturaleza para defender su litoral de los temporales y hacer sus playas más resistentes a la erosión. No son experimentos: ya se ha comprobado que estas medidas ganan anchura y cota de arena, la primera barrera que protege el tejido urbano.

Entre las actuaciones destacan la plantación de especies autóctonas, que fijan el sedimento y amortiguan el oleaje; la retirada de elementos duros (como una plaza sobre la playa y espigones) y el uso de captadores de caña para atrapar la arena que mueve el viento.

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DUAL

El proyecto europeo Impetus, liderado por Eurecat y con seguimiento de la Universitat de Girona, ha evaluado en los últimos años su eficacia y ha validado los resultados. En Calafell, situado en la Costa Daurada, se ha elevado el nivel del arenal, que actúa como reserva de arena capaz de redistribuirse de forma natural allí donde más se erosiona. El balance asciende a unos 2.000 m³ de sedimento acumulado y unas dunas que se autorregeneran, reforzando la protección del paseo marítimo frente a los temporales.

Sobre esa base arranca ahora DUAL (Dunas Urbanas Adaptación Litoral), un proyecto liderado por la Universitat de Girona, dotado con 1 millón de euros y cofinanciado por la Unión Europea. Apuesta por escalar y aplicar estas mismas soluciones de ingeniería natural no solo en Calafell, sino también en la playa de la Platera (Costa Brava) y en Argelès, en el sur de Francia. Consolida, así, un modelo de gestión costera que prioriza la dinámica natural de la arena como escudo frente a los temporales.

Playa de Calafell COSTA DAURADA

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Sistemas naturales

Según datos extraídos, del Diari de Tarragona y tal y como explica Carla García Lozano, de la Universitat de Girona: "Se monitorizarán los efectos de esos sistemas naturales de protección de la costa en las tres playas para comparar resultados y ver cómo reacciona la costa según sus características".

También, explica que se hará una diagnosis de todo el litoral catalán para determinar en qué otras zonas podrían aplicarse. Habrá una transferencia de la información desde la universidad a las administraciones, esencial para una acción conjunta, coordinada y estudiada.

Otra acción impulsadada por la Agence d’Urbanisme Catalane Pyrénées Méditerranée (Aurca), conjuntamente con la Universidad de Perpignan, será organizar talleres participativos con las entidades de cada territorio para potenciar las acciones de protección del litoral.

Playas de Calafell

Calafell goza de cinco kilómetros lineales e ininterrumpidos de playa, en el que es una fachada marítima prácticamente única en Cataluña que se divide en tres playas: la Playa de Calafell, que coincide con el núcleo de la Playa; la Playa de Segur, que coincide con el frente marítimo del núcleo de Segur de Calafell; y la Playa del Estany-Mas Mel, situada frente a los dos barrios que llevan estos nombres.

Estas playas son idóneas para el turismo familiar. De muy antiguo, Calafell ha sido conocido como 'la playa del biberón', por la calidad de la arena y del agua, por la tranquilidad del mar y por la suavidad de las pendientes cuando se entra en el mar.

Además, el agua tiene propiedades salutíferas, ya que tiene una concentración de yodo cinco veces superior a la normal en el mar. Entre 1926 y 1968 funcionó en la zona el Sanatorio Marítimo de San Juan de Dios, que curaba entes tuberculosos gracias a este don de la naturaleza.