Está es la desconocida playa del faro oculta en una villa romana de Tarragona

Está es la desconocida playa del faro oculta en una villa romana de Tarragona TURRISME TORREDEMBARRA

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Ni Empúries ni El Fangar: esta es la desconocida playa del faro oculta en una villa romana de Tarragona

A pesar de estar rodeada de escarpados acantilados de hasta 25 metros, esta cala cuenta con unas rampas que permite un fácil acceso para todos

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No hay muchos artículos sobre ella, en cambio, está en una zona muy conocida. No está en la Costa Brava, pero cuenta con la belleza de la menos turistificada Costa Daurada. Porque esta desconocida cala queda lejos de las masificadas Cambrils y Salou.

Sí, hay rincones de Cataluña que todavía no están llenos de turistas o, como mínimo, los que hay son locales. Uno de estos lugares es la playa de Cala Canyadell, en el límite entre Torredembarra y Altafulla.

Apodada "la cala del faro", este pequeño rincón natural, de apenas 60 metros de largo por 35 de ancho, no se puede confundir con la mítica Playa del Fangar del Delta del Ebro. Eso sí, la playa de la Costa Daurada tiene otros encantos: su accesibilidad y la serenidad del Mediterráneo.

A pesar de estar rodeada de escarpados acantilados de hasta 25 metros, esta cala cuenta con unas rampas que permite un fácil acceso para todos. En cambio, no son tantos los que se acercan.

Playa de fácil acceso

La escasa fama que tiene hace que tampoco sea tan concurrida, por lo que la experiencia de ir a la playa se convierte en lo que muchos sueñan: tranquilidad refrescante. Y, además, rodeados de naturaleza.

Mientras los pies se hunden en la arena dorada y el Mediterráneo acaricia los pies, echar la mirada hacia atrás permite ver un entorno de pinos y rocas que crean un escenario casi cinematográfico

Un faro especial

El faro completa esta experiencia. Esta construcción no oculta ninguna historia o leyenda digna de mención. Fue inaugurado en el año 2000 y, si bien se erige como un punto de referencia para navegantes y viajeros, no hace otra cosa que eso. Ahora, hace más fotogénico el lugar.

Lo que sí tiene más enjundia son las ruinas históricas que están a apenas 500 metros de la playa. Allí se alzan los vestigios de la Villa Romana d’Els Munts, un yacimiento del siglo I‑II d.C. que revela la etapa romana que marcó esta región. 

Cala Canyadell de Torredembarra

Cala Canyadell de Torredembarra TURISME TORREDEMBARRA

La playa de una villa romana

Se trata de los restos de la antigua residencia de verano del mismísimo Adriano. Una escultura dedicada a Antínoo dan pistas al respecto.

Els Munts es una de las villas aristocráticas mejor conservadas de la Hispania romana. Durante el siglo II d. C., coincidiendo con el máximo esplendor de la construcción, fue la residencia de Cayo Valerio Avitio, uno de los duunviros de Tarraco (el cargo más alto de la administración local) y de su esposa Faustina.

Camino de ronda

Cala Canyadell se halla integrada en la emblemática ruta del Camí de Ronda, un sendero litoral que discurre entre acantilados, playas y bosques, conectando núcleos costeros como Altafulla, Torredembarra y Tarragona. El tramo que la rodea ofrece un recorrido de aproximadamente 3 km entre ida y vuelta, sobre pasarelas de madera seguras y accesibles, ideal para combinar senderismo y baño.

Además, la cercanía de espacios protegidos como la reserva natural de Els Muntanyans aporta una opción extra para quienes quieran explorar humedales costeros, dunas fósiles y ecosistemas diversos. Esta reserva se caracteriza por su gran biodiversidad de aves limícolas, flora típica de dunas y una transición paisajística desde pinedas hasta zona marina.

Todos los servicios posibles

Eso no quita que la playa cuente con servicios de todo tipo. La Cala Canyadell cuenta con socorristas,, papeleras, duchas y un pequeño chiringuito estival que ofrece bebida, helados y comidas locales.

E cualquier caso el ambiente es relajado, con presencia de familias, parejas y amantes del snorkel, quienes disfrutan de unos fondos arenosos poco profundos y de fácil acceso desde la orilla.

Cómo llegar

La playa es accesible en tren. La línea de media distancia hacia el sud de Renfe para en Torredembarra, donde se llega tras una y cuarto de viaje. Desde allí, hay unos 20 minutos andando hasta Cala Canyadell.

En coche, es un poco menos, se tarda poco más de una hora. Si uno va por la AP-7 hasta Tarragona  toma la salida hasta Torredembarra solo ha de continuar por la N-340 hasta el municipio. A pocos metros hay una pequeña zona de aparcamiento gratuita.