
Aitor Echeverría y Emma Suárez en la casa donde se grabó 'Desmontando un elefante'
La casa de Barcelona donde se rodó la última película de Emma Suárez: obra de un conocido arquitecto en el barrio más pijo de la ciudad
Esta construcción se vuelve un personaje más de la nueva cinta protagonizada por la actriz
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Emma Suárez ha estrenado nueva película junto a Natalia Molina, Desmontando un elefante. Se trata del debut en el largo del catalán Aitor Echevarría, que se ha traido a este par de estrellas a su Barcelona natal, para protagonizar una cinta que habla del alcoholismo, la dependencia y la incomunicación.
La película relata la vida de Marga, una arquitecta que ha caído en el alcoholismo y que se apoya en su hija para salir adelante. No lo tendrán fácil, la desconfianza, el sobreproteccionismo y la vergüenza y silencios que genera la enfermedad en el entorno familiar van a tensar aún más una relación.
Emma Suárez y la casa
La historia ha cautivado ya a los espectadores españoles, pero muchos se han fijado en la casa en la que vive la protagonista y que adquiere mucho significado en la trama.
La misma Emma Suárez apuntaba a Crónica Global que la “casa que es quizás una metáfora del vacío en el que vive el personaje de Marga”. De hecho, tal y como se decoró para la cinta “le falta como amor, ternura”, detalla.
Dónde está
El inmueble en cuestión es una pieza única, una joya arquitectónica diseñada por Tonet Sunyer y ubicada en uno de los barrios más pijos de la ciudad, Sant Gervasi. En esta zona, no faltan los pisos de alto standing, las tiendas de diseño y los colegios concertados y privados.
Allí, se encuentra también esta casa, convertida también en el estudio arquitectónico de su creador. Un espacio que, en realidad, no está ni falto de amor ni de ternura, sino de pasión por el trabajo y cuidado en los detalles.
Una casa 'partida' en dos
Se trata de una vivienda de diseño vanguardista que destaca por el equilibrio de sus formas. Situada en un solar que antiguamente formaba parte del jardín de la finca contigua, esta residencia se erige en dos volúmenes complementarios, pero cohesionados.
El volumen mayor está destinado a la vivienda principal, y un pabellón de invitados, más pequeño, con un diseño cúbico. Ambos están alineados estratégicamente con las dos calles que flanquean la parcela y conectados por rampas que unen las dos fachadas, aporta un dinamismo único al diseño.
Dentro y fuera
Precisamente este es el espacio que más se muestra en la película. La cinta arranca en el salón de la casa y sucede entre este espacio y la cocina. Con escapadas regulares al jardín, lugar donde la protagonista sale en busca de aire, de libertad, huyendo de la presión que recibe del interior, no tanto de su casa como de su propia familia.
Claro, que todo se ve. Mientras que la fachada de la casa orientada a las rampas se presenta como un muro de ladrillo visto, el lado que da al jardín brilla por su transparencia. Aquí predominan el cristal y la madera, lo que permite que entre la luz y que, desde fuera, se aprecie revelando la estructura interna y la disposición de la casa.
Jardín y vistas
Esta vidriera da mucho juego a la película. Echevarría juego mucho con este exterior e interior, contemplando a sus personajes desde el otro lado del cristal, perdidos, desesperados e imposible de estar cerca de la otra persona.
Por lo que respecta al interior, está pensado para maximizar la funcionalidad y el confort, separando claramente los espacios comunes de los privados. Los primeros se encuentran en la planta baja, los dormitorios, en las superiores.
Escenario principal
Un mueble contenedor, que combina biblioteca, armarios y equipos multimedia, actúa como un divisor entre el eje central y el espacio habitable de la planta baja. Allí donde sucede la mayor parte de la vida familiar en la película. De hecho, esa biblioteca es casi el primer elemento que aparece en la película.
La primera planta apenas se ve. Es la que está dedicada al dormitorio principal y sus anexos, organizados como un espacio continuo separado por paneles correderos que permiten configurar las estancias según las necesidades del momento. En la segunda planta se encuentran los dormitorios gemelos, organizados simétricamente y conectados por un baño compartido.
Esto apenas se ve. Se muestra apenas en algunas escenas, pero muy de pasada. En cualquier caso, este diseño de Tonet Sunyer no ha pasado desapercibido para los que han visto la película, una cinta que, como la casa, merece atención.