Cataluña está repleta de ciclistas. Este deporte cuenta con cada vez más adeptos. Las bicicletas públicas de las grandes ciudades han animado a muchos a salir fuera de la urbe e irse por carreteras y senderos a explorar el territorio.
Los días soleados y las temperaturas veraniegas de estos días, dejando atrás las lluvias, ayudan a salir en bici y conocer el paisaje. Un plan ideal al aire libre para los que buscan nuevos rincones encantadores para descubrir.
Una ruta por el valle del Sió
En este contexto, la ruta del valle del Sió se presenta como una opción ideal para quienes desean explorar la belleza natural y la rica historia de Cataluña en bicicleta, pero también para los amantes de los animales y, en especial, de los ornitólogos. Este camino permite observar números pájaros de diferentes especies y, en verano, se le añaden las aves migratorias que llegan incluso desde África.
A través de los diferentes paisajes por los que transcurre esta ruta, y a medida que se recorren puntos claves de la historia de Cataluña, se pueden ver sisones, aves africanas que migran hasta allí con el buen tiempo y otros pájaros de secanos. Por eso, si se va en bicicleta se ha de ir alerta porque siempre hay algún fan de los animales con sus prismáticos atisbando los diferentes ejemplares.
Por dónde pasa
La ruta además es casi una novedad y se ha de estar preparado para hacerla en bici. Inaugurada recientemente, este camino atraviesa tres comarcas diferentes de Poniente: la Segarra, el Urgell y la Noguera. En total, el itinerario completo abarca unos 74 kilómetros, por eso es más fácil hacerla en bici que andando.
A pesar de que pueda parecer mucho, este trayecto presenta múltiples alternativas y distancias, permitiendo a los ciclistas adaptar el recorrido a sus preferencias. Esta flexibilidad convierte la ruta en una opción atractiva para todos los niveles, desde los aficionados a las largas distancias hasta quienes prefieren paseos más cortos y tranquilos.
Qué ver
El recorrido es una combinación perfecta de deporte, historia, patrimonio cultural, naturaleza exuberante y arquitectura digna de admirar. Los ciclistas pueden disfrutar de numerosos lugares de interés a lo largo de la ruta, incluyendo vestigios de la Guerra Civil Española en varios puntos del trayecto: búnqueres, trincheras y hasta refugios se observan si uno presta atención. Además, la ruta forma parte de la Red de Rutas Cicloturísticas de Cataluña y conecta en varios puntos con la Ruta Intercatalunya, que enlaza con Girona, Barcelona, los Pirineos y el Tren dels Llacs.
Para los que teman perderse, hay poca posibilidad de hacerlo. El río Sió, un afluente del Segre conocido también como Ribera del Sió, acompaña a los ciclistas a lo largo de todo el recorrido, proporcionando también un entorno verde y tranquilo.
Etapas de la ruta
La ruta comienza en Balaguer, una ciudad con estación de tren que facilita el acceso sostenible a la ruta. Desde aquí, los ciclistas se dirigen hacia Preixens, pasando por municipios como La Sentiu de Sió, Cubells y Montgai. Cada uno de estos lugares ofrece una rica historia y una arquitectura que merece ser descubierta.
El segundo tramo de la ruta va de Preixens a Ratera, pasando por Agramunt, Puigverd d'Agramunt, Ossó de Sió, Els Plans de Sió, Torrefeta y Florejacs. Agramunt, conocido por sus famosos turrones, es una parada obligada para los ciclistas. Aquí, los visitantes pueden disfrutar de una degustación de los deliciosos turrones de marcas reconocidas como Torrons Vicens y Torrons Félix. Además, Torrefeta y Florejacs, con su núcleo medieval, transportan a los ciclistas a otra época, añadiendo un toque mágico al recorrido.
El tramo final lleva a los ciclistas desde Ratera hasta Sant Guim de Freixenet, donde también hay una estación de tren. Este tramo atraviesa pueblos como Tarroja, Cervera, Les Oluges y Estaràs, ofreciendo vistas impresionantes de campos de cultivo y paisajes encantadores. Cervera, con su rica historia y su impresionante arquitectura, es una de las joyas de esta etapa.
Cómo llegar
Para los que quieran hacer esta ruta, lo tiene fácil. El punto de partida está en Balaguer, que está conectado en tren y en coche. Si se viene de Lleida, Renfe ofrece servicios frecuentes que conectan ambas ciudades en aproximadamente 30 minutos. En coche, se puede tomar la carretera C-13, en un trayecto de unos 25 minutos.
Desde Barcelona, los trenes de Renfe desde la estación de Barcelona-Sants hasta Lleida ofrecen conexiones que tardan desde poco más de media hora en alta velocidad y dos horas y media si se toma un regional. En coche, es más rápido. Se puede tomar la autopista AP-2 desde Barcelona hasta Lleida, y luego continuar por la C-13 hasta Balaguer y se tarda alrededor de una hora y cuarenta minutos.