La estatua más famosa de Barcelona que tiene una gemela en Madrid: se hicieron el mismo año y muy pocos lo saben

No hay viaje a una capital sin las visitas de rigor a monumentos históricos. Por suerte, en Barcelona tenemos el mar para amenizar las excursiones de este tipo, y en Madrid tienen los bares de tapas.

Sin embargo, no todo es distinto entre Madrid y Barcelona, algunas calles de la capital tienen similitudes con la ciudad Condal, y algunos otros elementos son idénticos en ambos sitios. Hoy te traemos un caso muy curioso, que quizás no conocías, y es la mítica estatua de Colón.

La estatua de Colón de Barcelona tiene réplica en Madrid

En realidad, hay 64 estatuas en el mundo dedicadas a Colón; en Barcelona y Madrid destaca el hecho de que son muy parecidas, aunque la de Barcelona es más alta.

Además, coincidió que ambas esculturas se empezaron a construir el mismo año, 1881. Eso sí, el proyecto fue distinto y su arquitecto, también. 

Algunas características de la estatua de Colón Barcelonesa

Con una imponente estatura de 57 metros y un peso colosal de 233.000 kilogramos, esta escultura colosal preside las Ramblas desde el punto más cercano al mar. De hecho, para imitar el gesto de descubrimiento, pusieron a Colón señalando el Mediterráneo, aunque de esta manera consiguieron señalar a Italia, en vez de América. Y es que para ello habría tenido que señalar hacia Plaza Cataluña, lo cual quedaba un poco extraño.

El arquitecto Gaietà Buïgas fue el encargado de su construcción, y su inauguración tuvo lugar en 1888 como parte de la ceremonia de la Exposición Universal. Hoy en día, la escultura forma parte de los iconos turísticos de Barcelona, junto con la cascada del parque de la Ciutadella, el Palau de Belles Arts o el Arc de Triomf. 

La estatua de bronce de Colón, esculpida por Rafael Atché, sostiene una carta de navegación con su mano izquierda y señalando, de manera simbólica, la ruta hacia América con su brazo derecho. Un detalle curioso es el tamaño desproporcionado del dedo índice de Colón, que mide 50 centímetros en lugar de los 40 que serían proporcionales al resto de la estatua. Esta modificación permite que el dedo sea más visible desde la calle, agregando un toque singular al monumento.

Además, como dato curioso, hay un mirador oculto en la esfera que queda a los pies de la escultura, en lo alto de la columna. Se llega a través de un ascensor interno de la misma columna y cuesta 4 euros el acceso.

Historia de la estatua de Colón en Madrid

La estatua de Cristóbal Colón, con una estatura de tres metros, fue esculpida en mármol blanco italiano. Ataviado con vestimenta propia de la época, lleva un sayo y manto característicos. Sostiene en su mano derecha una bandera de Castilla, descansando sobre un globo terráqueo, mientras que con la izquierda hace un gesto de ofrecimiento, con la mirada dirigida hacia el cielo.

Como curiosidad, la Comisión neoyorquina encargada de conmemorar el IV centenario (1892) del Descubrimiento de América solicitó a Suñol la creación de una estatua del Almirante, la cual fue fundida en bronce a partir del modelo que originalmente esculpió para Madrid. Actualmente, dicha estatua se encuentra ubicada en Central Park, Manhattan.

El encargo inicial para la estatua data de 1862, cuando el arquitecto Francisco Jareño Alarcón propuso instalarla frente a la Antigua Casa de la Moneda, bajo el diseño del escultor José Piquer Duart. Sin embargo, el proyecto se vio interrumpido y retomado en varias ocasiones hasta que en 1877, con motivo de la boda real, se reactivó por completo bajo la dirección del arquitecto Arturo Mélida Alinari y la escultura del catalán Jerónimo Suñol Pujol.

La obra, tallada en mármol de Carrara, finalmente se completó en 1885, aunque su inauguración oficial se pospuso hasta 1892 para coincidir con el IV Centenario del Descubrimiento de América. El monumento original, concebido en un estilo neogótico isabelino, destacaba por su majestuosidad y su pedestal de 17 metros de altura.

El proyecto experimentó cambios a lo largo de los años, incluyendo su reubicación en la plaza de Colón en 1972, y posteriormente, su traslado a los Jardines del Descubrimiento en 1977. Finalmente, en 2009, se llevó a cabo una nueva reubicación en la Glorieta de Colón como parte del Plan Especial Recoletos-Prado, con una inversión de 11,7 millones de euros.