Errores comunes que debes evitar en tus campañas corporativas de email marketing

El email marketing es uno de los recursos más óptimos que todo tipo de compañías pueden utilizar para aumentar su notoriedad, fidelizar a sus clientes o dar a conocer sus productos. Se trata de un medio de comunicación tan altamente adaptable que es realmente sencillo poder aplicarlo a diferentes ideas y modelos de negocio con resultados positivos. Poder utilizar el email marketing como un valor seguro no solo reside en las propias características de esta herramienta, si no que su efectividad también depende de cómo los equipos implementen las campañas.

A pesar de que el email marketing resulta un recurso accesible y que requiere de una mínima inversión, sí es cierto que esta sencillez puede llegar a confundir a los equipos y provocar errores de estrategia. Por todo esto, es esencial conocer los detalles que caracterizan las campañas de email marketing y aplicar en ellas las mejores prácticas para evitar que los buenos resultados se reduzcan drásticamente. 

No utilizar las herramientas de email marketing adecuadas

El primer error que se suele cometer, sobre todo, las primeras veces que se desarrolla una estrategia de email marketing es no hacer uso de una herramienta especializada y pretender hacerlo todo desde el editor de texto del propio servicio de mail. Hoy en día, contamos con excelentes herramientas que pueden ayudarnos a diseñar, maquetar, redactar, segmentar y enviar los correos e, incluso, que ofrecen estadísticas avanzadas para conocer el impacto real de la campaña. 

En este sentido, destaca el uso de plataformas como Mailrelay, una herramienta que actualmente ofrece una de las cuentas gratuitas más grandes del mercado, ideal para empresas o proyectos con poco presupuesto. Esta cuenta gratuita, unida a sus décadas de experiencia en el sector y a su soporte técnico especializado, ofrecen la posibilidad de crear desde cero una campaña de email marketing que resulte fructífera, a través de un sistema fácilmente usable y con una alta tasa de entregabilidad, que asegura que los correos electrónicos lleguen siempre a su destino. 

No segmentar adecuadamente a la audiencia

Una de las bases del éxito de cualquier campaña de email marketing es la segmentación; por eso, enviar el mismo correo a toda una lista de cuentas sin segmentar es un error que puede ocasionar más daños que beneficios. Dar por hecho que todo el público de una campaña tendrá los mismos intereses y necesidades claramente dará como resultado una baja tasa de apertura, ya que no todos los suscriptores estarán interesados en los mismos contenidos o productos.

Para poder aprovechar al máximo una lista de suscriptores es necesario dividirla en grupos más pequeños según sus intereses, su comportamiento de compra, su edad o su nivel de interacción con campañas anteriores. Esto permite personalizar al máximo cada mensaje y cada campaña, aumentando las conversiones y ofreciendo a los usuarios un contenido de valor con el que realmente se sientan identificados. 

Ignorar y no analizar las métricas de rendimiento

Uno de los puntos más críticos para evaluar el rendimiento de una campaña de email marketing son sus métricas, ya que resulta imposible mejorar los resultados o corregir errores si no se dedica tiempo y esfuerzo a recopilar y analizar los datos sobre la campaña. Centrarse solo en la creación y el envío del propio mail es un error bastante común, ignorando o no dando la importancia que merecen a las métricas para analizar los resultados y realizar los ajustes necesarios. 

Sin métricas, no se puede saber si una campaña está funcionando, así como tampoco se pueden identificar áreas que necesitan mejoras. Para solucionar esto, hay que monitorizar constantemente las tasas de apertura, los clics, las bajas de la lista suscripción y las conversiones. Así, se pueden hacer ajustes en el asunto del correo, el diseño, el storytelling o el contenido y hacer pruebas A/B para determinar qué tipo de mensaje funciona mejor con tu audiencia. 

Utilizar asuntos de correo poco atractivos o engañosos

El asunto del correo es, probablemente, la parte más esencial de una campaña de email marketing, ya que resulta la primera impresión que el destinatario recibe sobre una marca. Un error bastante común es utilizar asuntos poco llamativos, genéricos, demasiado largos o, incluso, engañosos, que generarán un sentimiento de desconfianza en el destinatario. Por eso, utilizar tácticas agresivas o clickbait en los asuntos de una campaña de email marketing puede hacer que el propio correo acabe marcado como spam. 

Para corregir este error es importante dedicar tiempo a hacer una tormenta de ideas sobre los asuntos, de manera que se puedan mejorar y retroalimentar entre ellos para poder encontrar el mejor asunto para cada campaña. Principalmente, los asuntos deben ser concisos, atractivos y realistas, es decir, no deben generar unas expectativas que después no se puedan cumplir y deben estar diseñados para provocar una respuesta positiva y de interés en el usuario. 

Enviar correos sin una llamada a la acción clara

El último error frecuente del que vamos a hablar es enviar una campaña de email marketing sin una llamada a la acción clara y visible. En este sentido, es importante diseñar los correos para que al usuario le quede claro en todo momento qué acción debe realizar después de haber leído el contenido, utilizando frases llamativas, que inciten a hacer clic de manera rápida y que propicien la conversión. Para esto, es importante personalizar los CTA según el mail, que los mensajes incluidos en la llamada a la acción sean claros y directos y que el propio botón del CTA esté colocado en un lugar destacado dentro del correo. 

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