Sigue el salseo del caso Rubiales. La última hora es que la FIFA (también conocida como la Filfa) ha suspendido de sus funciones al presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), el antedicho Rubiales. Golpe de efecto de los campeones de la ética y la moral que organizaron el último mundial de fútbol masculino en Qatar, cuna de los derechos humanos, pero al revés, y donde murieron miles de trabajadores en la construcción de los estadios.
El fútbol es una nación sin Estado pero cuya estructura internacional tiene más poder que el ochenta por ciento de los Estados. Y con un presupuesto también más grande. De ahí que el movimiento de Gianni Infantino, otro Kojak de la vida, sea un intento a la desesperada para evitar que el Gobierno de España le meta mano a la RFEF y nacionalice el balompié, lo que resultaría letal para los manejos, chanchullos y mandangas de la FIFA, la FOFA y la UEFA.
El asunto de nuestro testosterónico directivo es portada en todos los medios y también tiene una vis catalana. "El independentismo olvida el machismo de Salvadó o Laporta y atribuye el caso Rubiales al ‘ADN español’", titula al respecto Crónica Global. El independentismo es la guinda del pastel. No dijeron ni pío sobre la consecución del Mundial femenino (cosas del "país vecino") pero han saltado a la yugular de Ñ a la que han olido el plasma.
El texto de esta información es de María Jesús Cañizares y arranca así: "El independentismo más recalcitrante ha puesto un foco identitario en el beso robado de Luis Rubiales a Jenni Hermoso. Atribuyen este comportamiento, que ha recibido críticas incluso a nivel internacional, a una especie de ADN español, obviando que dirigentes secesionistas como Lluís Salvadó, o que el propio presidente del FC Barcelona, Joan Laporta, fueron objeto de duros reproches por sus declaraciones sexistas en el pasado. La tibieza del Barça en su condena a Rubiales, así como el apoyo de la Federación Catalana de Fútbol han desmontado esa teoría sobre la "españolización" de los abusos sexuales. Ambas posturas han sido criticadas por el gobierno catalán".
Sigue Cañizares: "Uno de los dirigentes que se ha sumado a esa politización ha sido el líder de ERC en el Ayuntamiento de Barcelona, Ernest Maragall, quien ha escrito en sus redes sociales que "el caso Rubiales es la expresión clara de lo que hoy está en juego en España: machismo, corrupción y poder personal contra feminismo, honestidad y democracia. Su destitución debe ser solo el primer paso en la profunda transformación del deporte profesional. También en Cataluña”. Las redes sociales se han encargado de recordarle que su compañero de filas, Lluís Salvadó, actual presidente del Puerto de Barcelona, es el autor de la frase: "Coges a la que tiene las tetas más grandes y ya está". Salvadó se disculpó por esos comentarios, pero el independentismo corrió un tupido velo al respecto".
Y: "También ha hecho uso de esa teoría de que el acoso sexual es "cosa de españoles" el hombre de confianza de Carles Puigdemont. El jefe de la oficina del expresidente, Josep Lluís Alay, considera que el acoso sufrido por Hermoso es "el precio por jugar con la camiseta española" y ha reprochado a su compañera en la selección, Alexia Putellas, que exprese sus quejas en castellano".
El resumen de la última réplica del terremoto balompédico en El Confidencial viene con las firmas de Alejandro Requeijo e Ignacio S. Calleja, quienes dan cuenta de la traición de los seleccionadores Vilda y De la Fuente: "La FIFA ha frenado en seco la huida hacia adelante que emprendió Luis Rubiales al grito de "no voy a dimitir". El máximo organismo del fútbol mundial ha tardado apenas unos días en abrirle expediente y apearlo provisionalmente del poder durante tres meses por su comportamiento en la final del último mundial femenino. Esta suspensión se adelanta así al proceso iniciado por el Consejo Superior de Deportes (CSD) y pone en jaque el desafío que el presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) le había lanzado al Gobierno de Pedro Sánchez. A su delicada situación se suma la dimisión en bloque del cuerpo técnico del equipo femenino y, sobre todo, los comunicados de los seleccionadores Jorge Vilda y Luis de la Fuente, que un día después de aplaudirle en la asamblea le han dado la espalda. El dirigente está abandonado por todos y sin apoyos".
En La Vanguardia, Carlos Novo retrata al sucesor interino de Rubiales: "Desde ahora, y de acuerdo a los estatutos de la Federación, asume la presidencia interina el vicepresidente adjunto a la Presidencia, Pedro Rocha Junco, el presidente de la territorial extremeña y uno de los dirigentes más afectos a Rubiales. La decisión de que sea Pedro Rocha el sucesor de Rubiales se tomó el viernes en una reunión antes de la asamblea y en la que Rubiales cesó de vicepresidentes a seis de los siete que tenía (entre ellos Joan Soteras, el presidente de la Federació Catalana) dejando solo a Pedro Rocha en la una línea estratégica en la que preveía la inhabilitación por parte del Gobierno".
Y: "Pedro Rocha, poco conocido en el mundo del fútbol, es un empresario vinculado al fútbol sala, deporte en el que jugó varias temporadas en la División de Honor. También ha formado parte de la directiva y el cuerpo técnico del Cacereño y en los últimos años ha sido directivo de la Federación Extremeña, de la que es presidente desde el año 2013. Contrasta con la dureza de la FIFA la pasividad de la UEFA, organismo del que Luis Rubiales es vicepresidente desde el 2019, un año después de asumir la presidencia de la Federación".
Ayer y bajo un benéfico aguacero arrancó en Barcelona la Vuelta a España en medio de la indiferencia del público barcelonés y hasta de los independentistas llamados por la ANC, Òmnium y los CDR a exhibir sus banderas. Y todo a media luz porque al Ayuntamiento le resultó imposible activar la iluminación pública antes de la hora programada, según cuenta El Periódico. A falta de mayores novedades, en El Nacional se congratulan de que los Mossos hayan asumido la seguridad del acontecimiento a su paso por tierras catalanas. "Los Mossos apartan a la Guardia Civil de la Vuelta 2023 en Catalunya y Andorra" titula el mencionado digital. El texto viene con la firma de Guillem RS: "De manera conjunta, y por primera vez, la Policía de Andorra y los Mossos d'Esquadra, la policía de Catalunya, darán seguridad a la Vuelta 2023, la prueba reina del ciclismo en España, en su paso por Andorra, en el inicio de esta competición que este sábado arrancó en Barcelona. Esta elección, que aparta a la Guardia Civil de esta vigilancia, ha generado fuerte revuelo entre el entorno de la policía militarizada española. Es una más de las batallas de la guerra encubierta que mantienen políticos y mandos de las dos policías y que, con la costa y el mar como verdadero objetivo, ahora han ganado los Mossos d'Esquadra con la seguridad de la Vuelta".
Un párrafo después, la nota sigue en estos términos: "En la práctica, se deja sin presencia de la Guardia Civil en los primeros cuatro días de competición, y, con carga altamente simbólica, teniendo en cuenta que la prueba sale del territorio estatal y lo hace bajo la protección de la policía catalana. El entorno de la Guardia Civil ya ha puesto el grito en el cielo y lo enmarcan en una nueva concesión del gobierno del PSOE a los independentistas de cara a la negociación que, presuntamente, mantienen para conseguir el 'sí' a la investidura de Pedro Sánchez. Además de las competencias en el mar, que están en pugna entre el Servicio Marítimo de la Guàrdia Civil y la nueva Policía Marítima de los Mossos d'Esquadra, en el medallero de esta batalla competencial también está la victoria, por parte de la policía catalana, de la dirección del plan director de la seguridad de la Copa América".
Pero hete aquí que en El Món se da cuenta de una iniciativa de la "policía estatal" (o Policía Nacional mayormente) relacionada con la seguridad de la Vuelta. "Cuatro detenidos en el Solsonés por amenazas contra la Vuelta" es el titular de un texto que firma Quico Sallés: "Un total de cuatro detenciones. Este es el balance provisional de un operativo de la Comisaría General de Información del Cuerpo Nacional de Policía en la comarca del Solsonès esta mañana. Según ha podido saber El Món, las detenciones se han practicado en el contexto 'de amenazas contra La Vuelta España', la carrera ciclista que pasará por Cataluña en los próximos días. El operativo, en el que no se descartan más detenciones, se mantiene secreto y no han transcendido ningún detalle sobre qué tipo de amenaza suponía ni sobre la organización que habría orquestado estas amenazas, a pesar de que la principal línea de investigación es que se trata de activistas independentistas que "estaban preparando protestas". Los detenidos han sido trasladados a las dependencias policiales de La Verneda, en Barcelona, donde se encuentra la central operativa del CNP".
Política. La amnistía es la gran cuestión y en El País entrevistan al "arquitecto" de la operación, Jaume Asens, quien afirma que "La ley de enjuiciamiento criminal prevé la amnistía: es constitucional". Bajo ese titular, Àngels Piñol entrevista al exdiputado podemita, a quien presenta en estos términos: "El abogado barcelonés Jaume Asens, de 51 años, exlíder parlamentario de Unidas Podemos, pasó en unas semanas de ser descartado como cabeza de lista de Sumar por Barcelona el 23-J a negociar la investidura. Es el hombre designado para mediar entre Sumar y Carles Puigdemont y, por extensión, con la mayoría progresista. Fue el letrado que asesoró a su amigo y entonces consejero Toni Comín para que saliera de España tras la proclamación fallida de la república porque se iba a actuar judicialmente contra el Govern. Está considerado el ideólogo de los indultos y de la derogación de la sedición y coordina a un grupo de catedráticos que elabora un informe sobre la amnistía. No quiere hablar de por qué no fue candidato. Está escribiendo un libro".En cuanto a la entrevista, estas son las preguntas y respuestas más destacadas:
Pregunta. La vicepresidenta Yolanda Díaz dijo que estaban negociando al máximo nivel con Junts. ¿Hablan con Puigdemont?
Respuesta. No puedo concretar. El PSOE llegó tarde a la negociación de la Mesa, estábamos estancados y le pedí a ella que se implicara. La negociación será lenta, larga, compleja y difícil. Exige silencio y prudencia. Hay una relación de confianza que no se puede romper.
P. ¿Cuál es su papel?
R. La vicepresidenta me llamó el día después de las elecciones y me encargó negociar la investidura con actores como Junts, ERC y Bildu. Lo acepté por responsabilidad. Estamos satisfechos con el acuerdo de la Mesa, con desbloquear el uso de las lenguas cooficiales y la comisión de investigación de espionaje del caso Pegasus. Con los adversarios se dialoga: no se les espía. Quedaron preguntas sin respuestas. Hay que ser valientes e ir más allá.
P. La investidura de Sánchez depende de Junts y ERC que reclaman la amnistía y el referéndum. ¿Lo ve viable?
R. Toda negociación parte de máximos pero hay motivos para el optimismo. Hay voluntad de acercar posiciones, acuerdo y reconocimiento de legitimidades. Estamos convencidos de que hay un conflicto político en los tribunales que hay que devolver a la política. Y una oportunidad que no debemos desaprovechar. A lo largo de la historia, Cataluña y España avanzan cuando las fuerzas progresistas se entienden con las catalanistas.
P. ¿La amnistía es la clave mucho más que el referéndum?
R. La amnistía puede ser una fórmula y la estamos estudiando. Podría servir para poner el contador a cero y volver a empezar. Iniciamos la desjudicialización con los indultos y ahora toca ser más ambiciosos, pasar página de muchas cosas sucedidas en el pasado y mirar al futuro. Cuando se recurre a la cúpula judicial controlada por la derecha, imbuida por la sacrosanta misión de una idea reaccionaria de España, se agrava el problema.
P. ¿Es un punto de inflexión que Pedro Sánchez diga que Junts es un grupo legítimo y que no se cierre a una amnistía?
R. Es una buena noticia. Junts es un actor con el que se debe poder llegar a acuerdos y dejar de demonizarlo. Se ha presentado a Puigdemont como un archienemigo de España. A un lado y otro ha faltado empatía y reconocimiento del adversario. En 2017, Puigdemont no encontró a nadie con quien dialogar en Madrid y al lado tenía a gente como Rufián, que le llamó traidor por no declarar la independencia. Y después, tarado por haberlo hecho. Junts debe valorar que hay un gobierno que ya no es una pared. Hay voluntad de dejar atrás el legado del PP de la porra, la cárcel y el no a todo.
P. ¿Tiene dudas de si la amnistía en constitucional? Hay mucha controversia.
R. No, el Constitucional ya lo resolvió con muchas sentencias a favor. La amnistía funda nuestro régimen político: nace con ella en el 78. La Constitución está muy influida por la alemana que a diferencia de la mayoría de países europeos no regula la amnistía. Lo que no está prohibido, está permitido. Si el constituyente hubiera querido, la habría prohibido como con los indultos generales, la censura o la pena de muerte.
Sobre los movimientos especulares del PP y el efecto que puedan causar en Junts escribe el director de La Vanguardia, Jordi Juan, con un expresivo título: "Puigdemont sigue soltero". Destacan estos dos párrafos de la carta dominical: "Lo que es menos conocido es que el propio Puigdemont no pone reparos a este diálogo con el PP. Solo pide, igual que ha hecho con los socialistas, que la negociación sea directa con él, sin intermediarios, y sea en Bruselas o en algún lugar de Europa. Puigdemont recurre en ocasiones a la metáfora de un restaurante para concluir que no hay diferencias entre lo que ofrecen los gobiernos del PSOE o del PP. Así, ejemplifica que en un restaurante del PSOE le sacan una vajilla de calidad, cubiertos de plata y un mantel exquisito, mientras que en el del PP los platos y los cubiertos son de plástico y la mesa está desprovista de cualquier mantelería. Ahora bien, en los dos restaurantes, los platos están vacíos. Su moraleja: el trato es mejor con los socialistas, pero los resultados son igual de malos".