2022 se estrena con sucesos extraordinarios en la política. El PP de Pablo Casado (que ha caído contagiado a causa de un contacto estrecho con un positivo) vuelve a hablar con ERC, cosa que no pasaba desde que Oriol Junqueras le echaba el aliento en el cogote a Soraya Sáenz de Santamaría, unos meses antes del 1-O. Se difuminan las líneas rojas, el enemigo pasa a ser adversario y la política se erige en el arte de lo posible, aunque eso suponga asumir y digerir contradicciones como ruedas de molino.
El propósito de estos contactos del PP con los republicanos catalanes sería el de tumbar la reforma laboral, un intento condenado al fracaso aunque en Génova 13, sede central del PP, no quieran ver lo obvio. Los comunes, que son la versión catalana de Podemos, han apoyado los Presupuestos de la Generalitat para que estos salgan adelante y Rufián, por mucho que se lo pida el cuerpo, no se va a cargar la reforma laboral de Yolanda Díaz por ese acuerdo en el Parlament y porque no va a pactar con el PP nunca, jamás, nein, no, ni de coña.
Sea como fuere, los conservadores lo intentan, también con el PNV según la información elaborada por Carmen Morodo para La Razón: "Pablo Casado votará que «no» a la reforma laboral que el Gobierno ha pactado con los sindicatos y con la CEOE. Pero la respuesta de la dirección popular a este acuerdo con los agentes sociales no se queda ahí. Génova ha puesto ya en marcha una ronda de contactos con los demás grupos, y esto incluye también a PNV y a ERC, para hacer un frente común y tumbar el Real Decreto que contiene el pacto, y que tiene que ser convalidado en el Parlamento. La tesis del PP es que lo que se quiera hacer en el mercado laboral, «tiene que hacerse a través de una ley»".
Sigue el texto líneas después: "La reforma laboral amenaza con marcar un punto de inflexión en la relación del Gobierno con sus socios, que ya han anticipado su negativa a suscribir un acuerdo en el que no han participado. Ni siquiera será fácil el entendimiento con el PNV, que quiere que se respete el ámbito de decisión vasca. Y, por ello, el PSOE puede verse obligado a explorar la vía de Ciudadanos: el partido de Inés Arrimadas necesita dar alguna utilidad a sus diez escaños, y este tema le ofrece una salida sin incurrir en graves contradicciones programáticas, a la vez que puede apelar al discurso de su compromiso con el sentido de Estado porque es una de las reformas pactadas con Bruselas en la negociación del reparto de los fondos de reconstrucción. (...) En medio de estas severas divergencias en la mayoría de la investidura el PP quiere ver una oportunidad para recuperar la interlocución con otros grupos parlamentarios. Ya ha tanteado al PNV en otras ocasiones, y los nacionalistas vascos han respondido con educación, pero dejando también claro que no entran en ninguna ecuación a futuro en la que esté Vox, y no tanto ya por ellos, como por las exigencias que fijará Santiago Abascal".
En el primer lunes del año, El Mundo le echa un cable a Casado y lo vuelve a colocar como campeón español de los sondeos, aunque con matices y reparos por su guerra contra Isabel Díaz Ayuso, la presidenta de la Comunidad de Madrid. Estos serían los resultados si las elecciones se celebraran hoy, según el diario de Unedisa: PP, 27,4% 118 escaños; PSOE, 26%, 102: Vox, 16,6% 58; UP, 10,9% 25; MP, 3,1% 6; Cs, 3,1% 1; ERC, 3% 12; JxCat, 2% 8; PNV, 1,9% 8; Otros, 6% 12.
Vox es la clave para que la derecha sume mayoría absoluta. El análisis es de Manuel Marraco y dice así: "El Partido Popular vuelve a ceder en las encuestas. En apenas un mes, la formación que dirige Pablo Casado se ha dejado algo más de un punto de intención de voto, lo que en caso de celebrarse ahora unas elecciones generales se traduciría en ocho escaños menos de los que se le pronosticaban a principios de diciembre. La encuesta de Sigma Dos para El Mundo refleja también quién es el beneficiado de ese movimiento: Vox. La formación de Santiago Abascal capitaliza el descenso del PP. Suma los 1,2 que se dejan los populares y añade otras cuatro décimas. Esa subida de 1,6 puntos en un mes, hasta el 16,6% de intención de voto, le reportaría 58 escaños. Se trata de 11 más que en la encuesta de diciembre y media docena por encima que los que tiene en la Cámara Baja. En el caso del PP, la bajada de 1,2 puntos en diciembre se añade a la de otro medio punto en el panel de noviembre. El balance de dos meses marcados por las disputas internas en torno al protagonismo de la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, es de 1,7 puntos menos en intención de voto y una bajada de 12 escaños. Con la vista puesta en la formación de Gobierno, la subida de Vox supliría la bajada del PP. Ambos partidos sumarían una mayoría absoluta: justo los 176 escaños necesarios. Actualmente, la intención de voto del PP se sitúa en el 27,4%, con 118 diputados. Ciñendo la comparación con las generales de 2019, el resultado sería bueno. Ganaría las elecciones con 6,6 puntos más de voto y un incremento de 30 escaños".
La subida de Vox es tema en El Independiente, que asegura que la formación de Abascal "comienza el año con más de 65.000 afiliados y 'cazando' a votantes del PP en las encuestas". Escribe Ana Belén Ramos: "Vox mira al nuevo año con optimismo. Su progresivo crecimiento en las encuestas paralelo al desgaste del PP por la crisis entre Génova y Ayuso les lleva a mantener el objetivo que ya comenzaron a proyectar a finales de 2021 y que prometen cumplir en 2022: Vox quiere utilizar su fuerza para entrar en gobiernos autonómicos y ensayar en los territorios el modelo que aspiran a implantar en la arena nacional, que no es otro que condicionar al PP de Pablo Casado en un futuro e hipotético ejecutivo de coalición. (...) Con la incógnita de cuál será finalmente la relación entre Vox y PP tras las elecciones de Castilla y León y Andalucía, los de Santiago Abascal afrontan esta nueva etapa en su mejor momento a nivel interno. Según trasladan fuentes de la formación, Vox cerró 2021 con más de 65.100 afiliados, un 12,2% más que en las mismas fechas que el año anterior"
La información de Ramos matiza, no obstante, que Vox está aún muy lejos de los que dice tener el PP: "Según los últimos datos actualizados de los populares, el partido liderado por Pablo Casado inició 2021 con unos 778.000 militantes, unos 83.300 adscritos menos que cuando Pablo Casado tomó las riendas populares tras imponerse en el Congreso Nacional de 2018 a Soraya Sáenz de Santamaría, cuando el partido hegemónico de la derecha cifraba su fortaleza en más de 861.000 afiliados".
Más política. Se avecina una tormenta en el seno del Gobierno por la comitiva para la toma de posesión del chileno Gabriel Boric. Irene Montero quiere ir y eso supone todo un problema protocolario, según El Confidencial. El texto es de Fernando H. Valls y dice así: "La toma de posesión del futuro presidente de Chile, Gabriel Boric, está provocando un nuevo roce en el Gobierno de coalición. Irene Montero quiere formar parte de la delegación española que, junto al Rey, acuda el próximo 11 de marzo a Santiago de Chile a un evento marcado en rojo para la izquierda occidental. El PSOE, por su parte, quiere que no se repita lo que ocurrió en Bolivia, cuando el entonces vicepresidente segundo, Pablo Iglesias, acudió junto al jefe del Estado y mantuvo una 'agenda privada' al margen de Exteriores".
Continúa la pieza: "Es tradición que Felipe VI acuda a las tomas de posesión de los presidentes latinoamericanos. Lo hacía como príncipe de Asturias y lo ha seguido haciendo como monarca. La Casa Real aún no ha comenzado a organizar el viaje, pero la presencia del jefe del Estado está prácticamente asegurada en un evento de este tipo. Ya encabezó la representación que viajó a Bolivia hace algo más de un año para la toma de posesión de Luis Arce. Es ahí donde han surgido los problemas en la coalición. El ministro de Exteriores, José Manuel Albares, tiene cerrados esos días para formar parte de la delegación española. También es habitual que el responsable de la diplomacia acompañe al Rey en el Airbus de las Fuerzas Aéreas españolas y atraviese el Atlántico. Desde Exteriores, por tanto, apuntan que el ministro estará en Chile junto a Boric. La ministra de Igualdad, por su parte, también quiere estar en Chile con Boric. Montero está organizando su agenda para acudir a la toma de posesión del ganador de las elecciones y, por tanto, formar parte de la delegación española. Exteriores ya conoce las intenciones de Montero y ahora queda por ver cuántas personas acompañarán a la líder de Unidas Podemos en el desplazamiento. Lo que está intentando el PSOE es que Montero no tenga una agenda al margen de la oficial. O que, al menos, se supervise".
Cataluña. Le están haciendo la cama a Puigdemont. Quieren que deje de presidir Junts para representar en exclusiva eso que llaman "exilio" y que es una pura entelequia. De la nota de Quico Sallés en El Món: "Dos membres de l’Assemblea de Representants del Consell per la República han registrat una resolució per tal que el president a l’exili, Carles Puigdemont, es “desvinculi de la presidència de Junts per Catalunya”. Es tracta d’una de les primeres iniciatives del “poder legislatiu” del Consell que es va constituir el passat 14 de novembre en un conclave constituent a Canet del Rosselló, a la Catalunya Nord. La proposta, a la qual ha tingut accés El Món, inclou que la seva baixa com a president del partit juntaire seria “recomanable que es produís abans de l’elecció d’un nou president del Consell per la República”".
Y: "La proposta de resolució ha estat registrada davant la Mesa tot i que reglamentàriament encara no és clar com s’ha de tramitar. Els impulsors de la iniciativa ja han començat a bastir complicitats entre els 119 membres restants de l’assemblea per tal d’aconseguir debatre si és compatible la presidència del Consell i la representativitat de l’exili amb la presidència de la formació Junts per Catalunya. Un debat que és força recurrent entre els electes del Consell per defensar la seva “transversabilitat” i amb “absoluta respecte cap a la seva figura”. De fet, és un debat intens que podria fer trontollar les estructures de poder de Junts per Catalunya".
Coronavirus. "La avalancha de contagios por la variante ómicron y el avance de la tercera dosis disparan la inmunidad entre la población" apunta El País, que completa ese titular con este sumario: "Los expertos auguran un enero complicado antes de que la protección adquirida empiece a dejar atrás lo peor de la sexta ola de coronavirus". La pieza viene con la firma de Oriol Güell y refleja unas perspectivas agridulces: "El inicio del nuevo año será complicado para España. Crecerá el número de enfermos graves y fallecidos. La variante ómicron apretará al sistema sanitario. Las plantillas quedarán diezmadas por la catarata de contagios. Y más de un millón de personas pasarán los primeros días de 2022 aislados tras haber dado positivo en las últimas fechas. Pasado el golpe, sin embargo, la inmunidad alcanzada por buena parte de la población después de haber superado la infección o gracias a la tercera dosis augura un futuro más esperanzador. Algunas previsiones, muy preliminares, apuntan a que el pico de la sexta ola podría alcanzarse durante la segunda semana de enero y, aunque ya son pocos los que aspiran a alcanzar la anhelada inmunidad de grupo con un virus que no deja de dar sorpresas, muchos sí auguran un escenario con menos infecciones y casos más leves, salvo para los grupos de más riesgo y aquellos que sigan sin vacunarse".
3 de enero, santoral: Genoveva, Estefanía Quinzani, Antero papa, Daniel diácono y mártir, Florencio obispo, Gordio, Luciano, Teógeno mártir, Teonas y Teopempo.